La calidad y entrega del delantero del Alcoyano Manuel Gato se encuentra fuera de toda duda, razón por la cual se ha ganado el respeto y la admiración de los aficionados. Con todo, sorprende el divorcio con el gol últimamente está marcando los partidos del futbolista natural de Benidorm. Para encontrar su última celebración, la séptima del curso, cabe remontarse al pasado 27 de noviembre en el derbi contra el Hércules.

Hasta ese momento, las dianas de Gato habían cobrado especial trascendencia contribuyendo, en algunos casos, a sumar puntos en los minutos finales y, en definitiva, a sostener al Deportivo en la zona noble. Incluso, el promedio de efectividad se encontraba al mismo nivel de la temporada de Segunda División, su mejor etapa de blanquiazul en este aspecto con 15 tantos.

Gato, como hombre experimentado de ataque, resta importancia a la estadística consciente de que obedece a una racha pasajera que perfectamente podría quedar erradicada el próximo domingo contra L'Hospitalet.

En otro orden de cosas, de cara a la visita del cuadro catalán el entrenador, Toni Seligrat, cuenta con las bajas confirmadas del mediocentro Mario Arques y del central Mario Fuentes, ambos por lesión. El resto de futbolistas del plantel, dieciséis, se encuentra disponible. En lo que respecta al «once», Pau Bosch cubrirá la ausencia del capitán Fuentes. La otra novedad apunta al extremo Jose García después de tres jornadas consecutivas alejado de la titularidad.