Pau Bosch, defensa central del Alcoyano, apunta a la titularidad mañana en el Camp d'Esports de Lleida por la lesión de su compañero Mario Fuentes. Se trata de un encuentro especial para el defensor natural de Fondarella puesto que defendió la elástica azulona durante cinco temporadas acumulando más de 200 partidos. Bosch conoce mejor que nadie del potencial de los catalanes en su feudo. «El Lleida es un equipo compacto al que cuesta hacerle daño sobre todo en su casa. El terreno de juego estará fantástico y se podrá jugar bien. Hay que intentar tener el balón y defender con él para que no pueda hacernos daño», explicó.

Bosch se refirió al tramo final de la competición regular comparándolo con un maratón. «Estamos en los últimos kilómetros. Quedan diez partidos y estamos en una situación privilegiada, pero si ahora bajamos un poco el ritmo no servirá de nada lo que hemos hecho.Hay que seguir como hasta ahora fijándonos sólo con el próximo partido. Primero hay que asegurar matemáticamente el play-off y luego mejorar la posición», sentenció.

La plantilla, salvo cambio de última hora, entrenará en El Collao a puerta cerrada para posteriormente emprender viaje a la capital de la comarca del Segrià.