Jorge Ureña, subcampeón de Europa de heptatlón, celebró su medalla de plata y espera este resultado que ponga «fin a la mala suerte del año pasado», cuando hizo tres nulos en disco en los Europeos al aire libre cuando estaba segundo y perdió la muy probable mínima para competir en los Juegos de Río.

«Estoy muy contento. A ver si esto ya significa parar con la mala suerte que he tenido el año pasado. Aún estoy asimilando esta medalla, estoy muy contento y muy cansado también. En la pértiga me moría pero ha tenido su recompensa», comentó el alicantino. «Venía con molestias, tengo una pubalgia, he estado tres semanas parado, no sabía lo que iba a pasar aquí. Empecé en el 60 muy bien, estaba molestándome y estaba pensado más en la pierna que en saltar. Luego me hicieron un vendaje y ha ido muy bien y partir de ahí parece que la cosa ha ido rodada», añadió. Felicitó al campeón, el francés Kevin Mayer, que batió el récord de Europa con 6.479 puntos. «El francés venía aquí después de ser plata olímpica y es un fuera de serie. Encima de ser muy bueno es un competidor de la ostia. El objetivo ahora es ir al Mundial de Londres, hay que hacer la mínima, a ver si sale. Lo intentaré en un mitin en mayo, luego tengo la Copa de Europa en junio y quedaría el campeonato de España como la última opción», señaló. Ureña se convierte en el primer alicantino en conseguir una medalla en el Europeo en pista cubierta. Conquistó la medalla de plata en el heptatlon de los Europeos en pista cubierta con una suma de 6.227 puntos que constituye la segunda mejor marca española de la historia, en una prueba que terminó con un nuevo récord de Europa, a cargo del francés Kevin Mayer.

La victoria fue para el subcampeón olímpico de decatlón en Río 2016, Kevin Mayer, con 6.479 puntos, que mejora en 41 puntos el récord continental anterior, en poder del checo Roman Sebrle con 6.438 desde 2004, y la medalla de bronce para el checo Adam Helcelet con 6.110. Ureña llegó a la última prueba, la carrera de 1.000 metros, con la plata prácticamente segura y la posibilidad de mejorar su plusmarca nacional, si corría el kilómetro en 2:41.61 o menos, pero lo hizo: necesitó 2:43.66 y se esfumó la plusmarca.

Dos años después de colgarse la medalla de plata en los Europeos sub-23 al aire libre, el atleta de Onil ha repetido en categoría sénior ese resultado con 23 años en los continentales bajo techo.