Los padres del fútbol base de la provincia exigen máxima seguridad para disputar los partidos y han pedido a la Conselleria que regule por ley la asistencia sanitaria en todos los campos de la Comunidad Valenciana. Así lo expone Antonio Martínez en un escrito remitido a Vicente Marzá, conseller de Deportes. «Queremos que en la ley del Deporte se incluya un apartado que obligue a que todos los campos de fútbol tengan asistencia sanitaria y desfibrilador para poder actuar con celeridad ante cualquier accidente», señaló ayer el padre de Salva, guardameta del Hércules cadete que acabó en el Hospital tras un encontronazo con otro jugador.

Para ello, se han recogido más de 3.000 firmas con objeto de que el gobierno autonómico regule la asistencia sanitaria «y no depender de los recursos de cada Ayuntamiento». «Ya que continuamente nos encontramos en la circunstancia de que la totalidad de los eventos deportivos no disponen de estas medidas mínimas y básicas, ya que estamos hablando de vidas humanas y consideramos de suma importancia evitar un desenlace fatal ante cualquier accidente o situación no deseada», señala Antonio Martínez en el escrito que ya obra en manos de la Conselleria.

Paralelamente, los padres también se han puesto en contacto con el Síndic a la espera de encontrar una solución ante los graves accidentes sufridos en los campos de fútbol base de la provincia.

En febrero del pasado año Aarón Vidal, jugador juvenil, sufrió una parada cardiorrespiratoria en la Ciudad Deportiva del Elche. Posteriormente, en noviembre, Salva Martínez, guardameta del Hércules cadete cayó al suelo quedándose inconsciente durante más de cinco minutos. A la semana siguiente, Pablo García, jugador del Racing San Gabriel, cayó desplomado al suelo en otro choque fortuito perdiendo el conocimiento durante cuatro minutos. Ese mismo día, Javi López, jugador del Aspe UD, también perdió el conocimiento tras un encontronazo.

«Todos los casos se saldaron sin tener que lamentar pérdidas humanas, aunque sí dejando alguna secuela, gracias a la suerte y a la ayuda de las personas que estaban viendo los partidos, pues en esos momentos los primeros auxilios son básicos y de vital importancia», afirma Antonio Martínez, que reunió un buen número de firmas con objeto de que sea la Ley del Deporte de la Comunidad la que regularice la asistencia sanitaria así como la obligatoriedad de disponer de los medios técnicos en cada uno de los campos.

También se quejó el padre del guardameta cadete del Hércules de que «las ambulancias, en casi todos los casos, tardaron entre 15 y 20 minutos en llegar aunque en el caso del jugador del Aspe fue peor, tardaron 40 minutos en acudir, motivo por el que el alcalde elevó una queja a la Conselleria», apunta Antonio, que confía en obtener una respuesta en breve.