La magia de El Collao emergió con tronío en los minutos finales de un partido que parecía decantando hacia el Gavà merced al acierto en el primer acto del mediocentro Alexandre Plà.
David Torres y Fran Miranda, impulsados por aliento de la grada, certificaron la remontada en poco más de cinco minutos elevando a quince meses la condición de invicto en Liga en el mítico feudo blanquiazul.
La victoria tiene valor doble por la derrota del líder, el Barcelona B, que ve como el Deportivo, su inmediato perseguidor, le ha recortado la diferencia a escasamente dos puntos a las puertas de un más que atractivo enfrentamiento directo el próximo sábado en el Mini Estadi (18.00/Esport3).
El choque, en el aire durante gran parte de la semana por el temporal de frío causante de una copiosa nevada en Alcoy, finalmente se disputó conforme a lo previsto. El trío arbitral, acompañado por el delegado de campo Gonzalo Olcina, inspeccionó el rectángulo de juego hora y media antes verificando que se encontraba apto para la práctica del fútbol.
El césped, con un drenaje excelente, aguantó perfecto durante los noventa minutos pese a que la lluvia hizo acto de presencia coincidiendo con el pitido inicial.
El cuadro catalán, pese a presentarse en Alcoy con apenas quince efectivos, dejó buenas sensaciones. Perfectamente ordenado (4-4-2) se movió como pez en el agua al contragolpe hasta el extremo de cobrar ventaja en el marcador y de disponer de dos claras ocasiones para sentenciar, abortadas con temple por el joven portero Miguel Bañuz.
El Alcoyano, por su parte, mantuvo el dibujo habitual en casa (4-4-2) pero con distintos protagonistas. El entrenador, Toni Seligrat, hizo debutar a Pau Bosch como lateral derecho, en detrimento de Álvaro García, mientras que el canterano Ángel López disfrutó de su primera titularidad de local como interior diestro desplazando a Gato a la mediapunta.
La fluidez de ideas brilló por su ausencia en el primer acto. El Alcoyano, con posesión de balón, abusó excesivamente del pase horizontal.
Aún así, David Torres pudo inaugurar el marcador con un espectacular remate a centro de López Silva que el veterano Craviotto salvó con el antebrazo.
Del hipotético 1-0 se pasó rápidamente al real 0-1. El Gavà armó con rapidez un contragolpe de manual culminado por Alexandre Plà con un disparo raso desde el interior del área. El desanimó se adueñó de los futbolistas del Deportivo, nada acostumbrados a este tipo de contratiempos delante de su afición.
Gato se erigió en el protagonista al filo del descanso. En primer lugar, porque pudo empatar con un remate de cabeza cruzado a la izquierda de Craviotto, que se limitó a contemplar la trayectoria del esférico. En segundo lugar, porque la pérdida del delantero alicantino propició otro veloz contraataque que a punto estuvo de concluir en gol. Miguel Bañuz, sobrio toda la mañana, resolvió con frialdad el mano a mano con el lateral Enric.
La tónica se mantuvo en la reanudación. Otra vez Miguel Bañuz, desbarató el disparo a bocajarro de Boris, máximo realizador del grupo III que no suele malograr este tipo de situaciones.
Seligrat, entonces, optó por mover el banquillo aportando más coherencia si cabe al equipo. Álvaro García y Mariano Sanz entraron por Pau Bosch y López Silva respectivamente. Así, Gato pasó a jugar en banda con Mariano Sanz como pareja de David Torres.
El Alcoyano convirtió los minutos restantes en un monólogo de constantes llegadas al área de Craviotto, acrecentado con la posterior incorporación de Jose García. El Gavà, no obstante, volvió a mostrar su mejor arma, la rapidez en la transición, gozando de otra gran ocasión que tampoco acertó a envíar a la red Héctor Camps, con pasado en el filial alcoyanista.
El premio al dominio y la insistencia llegó en el tramo final, con la grada completamente volcada con su equipo. El centro medido de Jose García sirvió para que David Torres, de cabeza, alojará por fin el esférico en la red, con suspense puesto que el balón impactó primero en la parte interior del travesaño para posteriormente rebasar la línea.
Apenas cinco minutos después, otro balón colgado al área, en esta ocasión por Gato, lo prolongó Tomás Ruso para que Fran Miranda entrara con todo certificando la remontada.
El Gavà quiso morir matando y hasta el último instante acarició el empate por medio de Sascha, pero delantero tampoco acertó a colocar el balón entre los tres palos del marco de Bañuz.
El Alcoyano trató de conservar la pelota en el tiempo de prolongación, cinco minutos, para sellar la novena victoria en casa que mantiene el paso firme hacia la fase de ascenso a Segunda División, aunque la plantilla mantiene el objetivo de hacerlo como campeón. Todo pasa por puntuar el sábado en el Mini Estadi.
