La revista especializada 'The Ring Magazine' nombró a Muhammad Ali el Boxeador del Año 1966, medio siglo después de que no le otorgase este reconocimiento, por negarse a prestar el servicio militar que le obligaba ir a la Guerra de Vietnam y por su relación con la Nación del Islam.

La pasada noche, la revista especializada informó de que estaba corrigiendo su decisión al nombrar retroactivamente al fallecido peso pesado como el mejor boxeador de ese año.

"Los editores en ese momento obviamente estaban convencidos de que Ali, aunque era exitoso en el cuadrilátero, no cumplía con otros criterios que ellos consideraban importantes", señaló el editor en jefe Michael Rosenthal. "Pero podemos ver la injusticia a través de los estándares actuales, incluso si estamos en desacuerdo con algunas cosas que Ali dijo e hizo".

Ali ganó las cinco peleas que tuvo en 1966 y lo hizo de manera espectacular.

Su carrera, que se encontraba en lo más alto, pronto quedaría interrumpida tres años, mientras tenía que hacer frente a una disputa legal por negarse a ser reclutado para la guerra de Vietnam.

Era la segunda vez que la revista no lo nombraba púgil del año y dijo que Ali -'Ring' lo llamó Cassius Clay, su nombre de nacimiento- no cumplía con el criterio moral para obtener la distinción.

"Más enfáticamente, Cassius Clay, de Louisville, Kentucky, no será visto como ejemplo para los jóvenes de Estados Unidos", escribió en ese entonces Dan Daniel, cofundador de la revista.

Posteriormente, la Corte Suprema de Estados Unidos ratificaría el estatus de Ali de objetor de conciencia y éste reanudó las peleas en 1970.

La revista lo nombró boxeador del año en 1972, 1974, 1975 y 1978, junto con su reconocimiento original en 1963.

Ali murió el pasado junio a los 74 años, después de una lucha durante varias décadas contra la enfermedad del Parkinson.

La historia del reconocimiento retroactivo, además de la historia original de 1967, se publicará en la edición de 'Ring' del próximo marzo.

Familiares allegados al legendario púgil han recibido con agrado el reconocimiento póstumo que se hizo al que muchos consideran el boxeador más grande de todos los tiempos.