La composición de la directiva del Eldense no termina de normalizarse, ya que han transcurrido casi dos meses desde que anunciaran sus dimisiones tanto el expresidente Germán Torregrosa como el exsecretario Antonio Cerdá, pero el club continúa sin comunicar dichas salidas ante los organismos federativos.
En ese sentido, para la Federación Española de Fútbol y para la Federación Valenciana, tanto Torregrosa como Cerdá continúan estando al frente del Eldense, cuando en realidad están desvinculados y no asisten a las reuniones que celebra el club, lo que les impide firmar nuevas contrataciones o conceder cartas de libertad, llegado el caso. Esa función debería ser del nuevo presidente y secretario, cuyos nombres no figuran en el organismo federativo.
Por otro lado, los directivos en funciones que están al frente del Eldense no han celebrado asamblea de socios para formalizar una junta gestora y no han convocado elecciones presidenciales, conforme indican los estatutos y el reglamento de régimen interno del Eldense, constituido en el año 2011 siendo Alfonso Ortuño, vicepresidente en la etapa de Germán Torregrosa, uno de los firmantes del documento.
Todo hacía indicar que el club había remitido las dimisiones a la Federación, ya que el 24 pasado de noviembre la entidad deportivista se movió con celeridad para recoger la firma del expresidente y la del exsecretario y así presentarlas en la Federación, pero de momento no han llegado.
En relación a esa situación tan peculiar por la que atraviesa la entidad, con un presidente que dimitió el 17 de octubre y que sigue en activo a nivel federativo, este diario ha podido conocer que existe interés por parte de algún socio del club azulgrana en dirigirse a la Federación para que trate de exigir la normalización de la cúpula direccional del Eldense, al tiempo que tiene interés en conocer quién ostenta en la actualidad la presidencia tras marcharse Torregrosa, así como averiguar el nombre del sustituto del exsecretario Cerdá. Además, el club tampoco ha comunicado la salida del vocal Marcos Guill, el primero en dimitir en el mes de septiembre.
