Manuel Gato, delantero del Alcoyano, es uno de esos futbolistas por los que merece la pena realizar un esfuerzo económico para renovar el abono o por animarse de vez en cuando a pasar por taquilla. Con él sobre el rectángulo de juego cualquier cosa puede suceder a lo largo de los 90 minutos, de bella factura por regla general.

La afición del Alcoyano está disfrutando más si cabe de la segunda etapa de Gato como blanquiazul. De sus botas han nacido tres dianas de antológicas en El Collao, la última contra el Hércules el equipo que le dejó marchar el pasado verano pese a gozar de un año más de contrato.

«Forma parte de mí pasado. Guardo buenos recuerdos de mucha gente de allí y de la que no simplemente la he eliminado. No guardo ningún rencor, la gente que no se portó bien o no hizo las cosas como debía la he eliminado. Tengo muchos amigos allí y deseo que les vaya bien siempre y cuando no nos afecte a nosotros negativamente. Que les vaya bien en la Copa porque soy del Madrid y si ganan al Barcelona tampoco estaría mal», declaró el hombre más en forma del ataque del Deportivo.

Gato se ha especializado en rubricar goles extraordinarios y decisivos en casa, curiosamente todos en la portería ubicada en el fondo de Gol B. Barcelona B, Prat y Hércules, han saboreado la misma medicina elaborada en las botas del genial futbolista de Benidorm. «Al final todos los tantos valen lo mismo, lo que importa es meter la pelota dentro. En el caso del Hércules el balón fue un poco ajustado pero fue importante porque significó el 2 a 0. Con el rival con diez le pesó mucho en lo que quedaba de partido».

Gato, por otro lado, se refirió a la contundencia del resultado del derbi (3-0). «Esperábamos ganar porque es el objetivo que teníamos. En casa estamos siendo fuertes, estamos en una línea buena, haciendo un buen trabajo y lo conseguimos. Creo que francamente las cosas nos salieron muy bien. Cuando el equipo está bien hay más posibilidades de ganar por un resultado como el del domingo».

Con respecto a si se trataron de los mejores 90 minutos de la era Seligrat, Gato señaló que «es un pregunta que no puedo responder porque antes tendría que analizar uno a uno los que hemos jugado hasta ahora. Sí fue uno de los mejores porque el equipo estuvo muy bien de principio a fin, hubo pocos momentos de indecisión o de pasar apuros excepto el penalti. Son errores que se comenten y unas veces la suerte está de un lado o de otro. Aunque ellos lo hubieran marcado creo que el nivel del equipo se hubiera mantenido».

Gato, por último, se refirió a la distancia de 7 puntos que separa al Alcoyano, segundo, del Cornellà, quinto clasificado.

«Sabíamos que si ganábamos, no sólo por el rival o por los goles, nos íbamos a distanciar de los perseguidores y a seguir la estela de otros que como nosotros han ganado», concluyó el goleador alcoyanista.

Aumentan las bajas

Superada la euforia del triunfo contra el eterno rival, el retorno a la realidad pone sobre el tapete la dificultad con que el entrenador, Toni Seligrat, afrontará el encuentro del próximo domingo en el Mini Estadi de Villarreal (12.00).

A las bajas ya conocidas por lesión de Mario Fuentes, López Silva y Jorge Devesa, se suman esta jornada Jony Ñíguez y Carlos Barreda, en ambos casos por acumulación de amonestaciones.

Se trata de dos futbolistas básicos en el esquema de Seligrat que por su polivalencia pueden adaptarse a varias demarcaciones. El lateral Barreda, por ejemplo, viene actuando últimamente de central para cubrir la prolongada ausencia de Mario Fuentes.