Los equipos de la máxima categoría entran hoy a escena en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, una ronda en la que los modestos de Tercera y Segunda B supervivientes vivirán una fiesta como anfitriones de los grandes.
Esta ronda tuvo como aperitivo a finales de octubre el partido de ida del Leonesa-Real Madrid por la participación de los blancos en el Mundial de Clubes de Japón. El equipo de Zidane sentenció la confrontación con un autoritario 1-7 y la vuelta, mañana en el Bernabéu, será un trámite y una alegría para los jugadores del conjunto castellano que podrán jugar en el coliseo blanco.
El formato de la competición copera, con las eliminatorias a doble partido, hace muy complicado que se produzca alguna sorpresa, como ocurría cuando se jugaba tan solo un partido en el campo del equipo de inferior categoría.
El Barcelona, defensor del título, acude a un campo como el Rico Pérez y ante un rival histórico como el Hércules aún con los ecos de su afortunado empate en San Sebastián tras un mal partido ante la Real, y, como el Madrid, con el clásico del sábado como trasfondo.
El Sevilla, subcampeón la pasada edición, empieza un torneo que en los últimos años le ilusiona y suele ser protagonista en el feudo del único superviviente de Tercera, el Formentera, cuya isla está enloquecida con la visita del cuadro de Sampaoli, tercero en la Liga en un inicio de campaña ilusionante.
El Atlético de Madrid visitará al Guijuelo, que hace 15 días destituyó a su entrenador, Mateo García, y nombró a Jordi Fabregat. El partido se disputará en El Helmántico de Salamanca, que reabrirá sus puertas al fútbol de elite después de varios años cerrado tras la desaparición del Salamanca.
El Toledo de Onésimo Sánchez, herido tras la goleada sufrida ante el Albacete (0-6), espera dar una imagen muy distinta ante el Villarreal, cuya misión es evitar la sorpresa en el Salto del Caballo y remontar el vuelo tras los últimos contratiempos que le han complicado la situación en LaLiga y en la Liga Europa.
El Sardinero albergará un bonito duelo entre casi vecinos, entre otro histórico en reconstrucción, que lucha por salir de Segunda B, como el Racing y el Athletic, que debuta en su torneo favorito.
