Sólo el líder e invicto Olimpic de Xàtiva ha sido capaz de acabar con la racha positiva del Orihuela desde que llegó al banquillo el técnico José Manuel Roca. Los números del técnico oriolano siguen siendo de campeón y a penas se ven empañados por un tropiezo que supone la primera derrota y el primer partido en el que el conjunto escorpión no es capaz de perforar la portería contraria desde la llegada del actual entrenador a mediados de septiembre.

Tras disputar nueve partidos, el equipo de Roca ha logrado cinco victorias, tres empates y una derrota. Pero, principalmente, destaca por su facilidad goleadora, ya que ha marcado 21 goles, lo que supone una media de algo más de dos por partido, y sólo ha encajado cinco. Además, en este periodo de tiempo, el delantero Raúl se ha convertido en el máximo goleador del grupo VI de Tercera División con diez tantos, posición que mantiene con dos goles de ventaja con respecto a sus perseguidores, pese a no haber visto puerta ante el líder.

«Felicité a mis jugadores porque fue un partido muy disputado que parecía de superior categoría, con dos equipos que proponían fútbol, defendían bien, administraban la pelota y presionaban arriba. Los jugadores se dejaron todo e hicieron un partido muy bueno, pero condicionados por la expulsión de Perona», destaca el preparador oriolano, que quien considera que la expulsión «fue muy rigurosa», pero no quiso darle más importancia. «Lo que se le pide a un árbitro es que sea equitativo en sus decisiones», concluyó.