Los Cubs de Chicago pusieron fin a una espera de 108 años y se llevaron el título de las Series Mundiales de las Grandes Ligas del béisbol al vencer a domicilio a los Indians de Cleveland por 8-7 en 10 entradas en la serie final al mejor de siete partidos.

El triunfo de los Cubs desencadenó una enorme celebración en las calles de Chicago, después de más de un siglo de frustración reprimida para los aficionados desde su último campeonato de las Grandes Ligas en 1908.

Los jugadores de los Cubs llevaron a cabo su propio festejo en el diamante 'Progressive Field', ovacionados por sus aficionados, tras haber desaprovechado una ventaja de 6-3 con cuatro 'outs' en el juego, sólo para repuntar y alcanzar el título.

"Este es uno de los mejores partidos que alguien verá", dijo el jugador de los Cubs Kris Bryant. "Esto supera todo, estoy llorando. Realmente no puedo poner en palabras lo que esto significa", agregó.

La victoria en las primeras horas de la madrugada del jueves coronó una remontada de Chicago, que iba 3-1 abajo en la serie al mejor de siete partidos, una hazaña lograda por última vez por los Royals de Kansas City en 1985.

Este fue el tercer título de las Series Mundiales para los Cubs, mientras que los desconsolados Indians les reemplazaron como el equipo con la sequía actual más larga del título, de 68 años.