EL tenista argentino Juan Martín del Potro ha vuelto a conquistar más de dos años después un título, al imponerse en la final del torneo de Estocolmo, de categoría ATP 250 y disputado sobre pista dura, al estadounidense Jack Sock (7-5, 6-1).

Del Potro, número 63 del mundo y que tras este triunfo volverá al «Top 50», sólo necesitó una rotura en el undécimo juego del set inicial para adelantarse en el encuentro. En la segunda manga, sólo permitió a su rival ganar un juego y, con tres quiebres, solventó en una hora y 17 minutos el duelo.

De esta manera, el de Tandil alza el decimonoveno título de su carrera; de hecho, el argentino, maltratado por las lesiones, no ganaba un trofeo desde el torneo de Sidney en enero de 2014.

«Este torneo significa mucho porque es el primer título después de mi vuelta. Agradezco la participación. Gracias a los organizadores por la invitación. creo que fue una buena decisión, creo (risas)», dijo tras levantar el trofeo. Y finalizó con un agradecimiento en español a su familia y amigos: «Quiero agradecerle a toda la gente que siempre me apoyó y que nunca dejó que baje los brazos, estoy acá gracias a mis amigos, a mi familia, a la gente que me apoyó sin saber si iba a seguir jugando al tenis o no».

Carreño, en plena forma

Por su parte, el tenista español Pablo Carreño logró el segundo título de su carrera deportiva tras imponerse en la final del torneo de Moscú, de categoría ATP 250 y disputado sobre pista dura, al italiano Fabio Fognini en tres sets (4-6, 6-3, 6-2) en dos horas de partido. El primer set se caracterizó por la máxima igualdad; el intercambio de juegos se resolvió en favor de Fognini por 6-4 después de romper el saque del asturiano en dos ocasiones, por un único 'break' del español. Sin embargo, en la segunda manga, fue el tenista italiano, número 50 del ranking mundial, quien cometió un mayor numero de errores que aprovechó el de Gijón para romper su servicio en el segundo y el cuarto juego y establecer una ventaja que se extendió hasta cerrar el parcial por 6-3.

El tercer y definitivo set se tornó muy duro.