El Alcoyano recibe al Lleida Esportiu con el objetivo de encadenar la cuarta victoria en El Collao y de prolongar la racha en su estadio puesto que no cede los tres puntos desde hace un año. La última derrota se remonta al 18 de octubre de 2015 frente al Badalona (0-1).

El equipo de Toni Seligrat, además, se mantiene invicto durante el presente curso circunstancia que le ha catapultado hasta el segundo lugar de la clasificación.

El alta de los dos únicos centrales específicos del plantel, Mario Fuentes, recuperado de la lesión en el sóleo, y Tomás Ruso ayudará a recomponer el eje de la zaga emulando el modelo de las cinco primeras jornadas.

De este modo, Toni Seligrat devolverá a Barreda a la demarcación de lateral derecho, mientras que Álvaro García adelantará la posición para actuar como interior.

El delantero Mariano Sanz, inmerso en el proceso de recuperación de la rotura de fibras en el bíceps femoral, figura como la única ausencia.

Toni Seligrat, Mario Fuentes, Barreda y el preparador físico Josep María Ferrer cuentan con pasado en el Lleida. En este sentido el entrenador calificó el choque de «especial porque aquí hay técnicos y jugadores que hemos estado allí. Cuando nos enfrentamos a estos equipos tienes una motivación especial por ganar», dijo Seligrat.

El preparador del Deportivo apuntó que «ellos tienen el mismo objetivo que nosotros, la promoción, y querrán ganar a un equipo que todavía no ha perdido», sentenció.

El cuadro catalán, por su parte, dispone de un plantel remozado, en fase de acoplamiento y que todavía no conoce la victoria a domicilio.

Su entrenador, Gustavo Siviero, definió como factor determinante para sorprender en Alcoy «mantener la portería a cero».

El argentino incidió en «la posesión» como arma para evitar las transiciones rápidas del Alcoyano. «Hemos de tratar de jugar mucho tiempo cerca de su área y atacar su portería con decisión», concluyó.