La joven que aparece en un vídeo sexual manteniendo relaciones con dos jugadores del Eibar, Sergi Enrich y Antonio Luna, presentó ayer una denuncia ante la Ertzainza contra los jugadores. La chica ha interpuesto la denuncia por el daño a su imagen que ha producido la difusión de estas imágenes sin su consentimiento. El vídeo, que se convirtió ayer en un fenómeno viral en las redes sociales y en intercambios a través de móviles particulares, fue grabado hace un año y en las imágenes se aprecia que cuando la chica se da cuenta de que está siendo grabada pide a los jugadores que apaguen el móvil.

Mientras, Sergi Enrich y Antonio Luna pidieron ayer disculpas después de que el citado vídeo de contenido sexual haya sido difundido por las redes sociales.

A través de la cuenta personal de Twitter de Enrich, los futbolistas han colgado un comunicado en el que «lamentan» que la difusión del vídeo «pueda dañar su imagen, pero especialmente la del club» armero, y «haya podido ofender a los aficionados y a la ciudad de Eibar, en general». Aseguran que son «conscientes de que los futbolistas profesionales deben dar ejemplo en todos los ámbitos, especialmente a los niños», razón por la que piden «disculpas si este incidente ha podido herir a alguien».

Los jugadores piden también disculpas «por el daño que pueda suponer la divulgación del vídeo a la imagen» de la mujer que aparece en el mismo.

Enrich y Luna recalcan que el vídeo «de contenido sexual» se trata de la «grabación de un acto íntimo y privado, llevado a cabo entre personas adultas con pleno consentimiento por parte de todos y en el ámbito de la libertad de la que todos disfrutamos».

Asimismo, «lamentan profundamente» que una «indiscreción» de la que aseguran no son responsables haya supuesto que «estas imágenes hayan salido a la luz sin su conocimiento ni mucho menos su consentimiento».

Concluyen que «como jugadores» de un club «ejemplar como el Eibar» que representa a «una afición y una ciudad igualmente ejemplares» se reafirman en los valores que les han sido trasmitidos desde su llegada a la ciudad guipuzcoana y esperan que este incidente «no suponga ningún menoscabo a la imagen del club».

Los dos jugadores se quedaron ayer fuera de la convocatoria hecha pública por el club armero para un partido amistoso contra el Leganés en Lerma (Burgos).

El Código Penal, tras la reforma que entró en vigor en julio de 2015, tipifica como delito contra la intimidad y el derecho a la propia imagen la divulgación no autorizada de imágenes íntimas obtenidas con el consentimiento de la víctima, pero luego difundidas sin que ésta lo sepa.

El texto, que contempla pena de prisión, modificó el de 1995, en el que el tipo penal que existía para este supuesto se refería a la difusión, revelación o cesión de imágenes de personas físicas, a las que se hubiera accedido sin autorización. El artículo 197.7 del Código establece que se castigará con una pena de prisión de tres meses a un año o multa de seis a 12 meses las conductas consistente en la difusión sin autorización de imágenes captadas con autorización.