José Manuel Roca ha cambiado el rumbo del Orihuela desde su llegada al banquillo escorpión. Desde su llegada su llegada, el conjunto oriolano ha hecho pleno consiguiendo los seis puntos posibles, ganando por primera vez en casa y sumando dos victorias seguidas, también, por primera vez, en la actual campaña. Además, los números son indiscutibles, con seis goles a favor y ninguno en contra en sus dos encuentros oficiales como entrenador escorpión.

Con la llegada de Roca, el planteamiento en los partidos también ha cambiado radicalmente. Se muestra mucho más ofensivo y asume riesgos que, hasta el momento, eran impensables. De hecho, el pasado domingo contra el Recambios Colón jugó los últimos minutos con una línea defensiva de tres, de los que, incluso, los laterales subían la banda.

Y es que Roca lo tiene muy claro: «Es fundamental que se insista en el área rival, unas veces aprovechando la altura de Antonio y otras mediante las bandas y centros. El jugar con una línea de tres era una de las posibilidades que barajo siempre que se puede. Leemos el partido y si se crean ocasiones no se tiene que cambiar nada. Pero si no se crean hay que cambiar». Para el técnico amarillo, el Orihuela «tiene que ir a ganar siempre fuera y dentro independientemente del rival, y si hay que arriesgar es algo que tenemos que asumir para ganar partidos».