El Sevilla, como ha sucedido en otros partidos de esta campaña, sufrió para ganar en el Sánchez Pizjuán, pero dos goles del delantero francés Ben Yedder, el segundo en el minuto 90, le dieron la victoria (2-1) ante un Alavés correoso que estuvo cerca de volver a puntuar fuera de su campo.

Los sevillistas llevan un pleno de cuatro triunfos como locales en esta Liga tras superar al Alavés, un rival que mostró sus armas, como lo hizo en su victoria en el campo del Barcelona y con el empate en el del Atlético de Madrid, aunque en esta ocasión no pudo conseguir un buen resultado pese a que estuvo cerca en un choque en el que el calor castigo a todos.

Si en la primera mitad el Alavés hizo dos cambios casi seguidos por lesión, en la segunda fueron dos sevillistas, el medio Nasri y el delantero argentino Luciano Vietto, a los que les afectó el calor y el desgaste muscular, por lo que tuvieron que ser sustituidos.

Sarabia tuvo otra buena oportunidad para abrir el marcador a favor del Sevilla, cada vez más volcado sobre el área adversaria en un partido en el que hasta el árbitro tuvo que ser asistido.

El premio le llegó a los sevillistas a los 73 minutos con un tanto de Ben Yedder poco antes de que Mateu Lahoz se tuviera que quedar en la banda y ser sustituido por el cuarto árbitro, el extremeño José Hernández Maeso.

La reacción alavesista fue inmediata y se fue con descaro hacia el área local y, tras un par de avisos, el defensa Víctor Laguardia, a la salida de un córner, logró el empate en el minuto 84, aunque en el 90, Ben Yedder, de tacón, volvió a darle la ventaja a los locales.