El Comité de Competición y Disciplina Deportiva de la Federación de Balonmano de la Comunidad Valenciana ha impuesto la sanción máxima de cuatro años de suspensión al jugador del Vinaroz Eddy Córdoba Murillo que el pasado mes de mayo agredió de forma brutal al colegiado alicantino Daniel Orts durante un partido de la fase de ascenso a Segunda Nacional autonómica en el pabellón de Agustinos de la capital alicantina.

La resolución del órgano disciplinario llega un mes después de la sentencia del juzgado de instrucción número 3 de Alicante que considera hechos probados que durante el partido entre el Vinaroz y el Benetusser, «con motivo de una decisión arbitral que expulsaba a un jugador, el árbitro Daniel Orts fue golpeado en la parte derecha de la cara, por la espalda y dándole un puñetazo al árbitro».

La sentencia también considera probado que, a causa de la brutal agresión, Daniel Orts sufrió lesiones consistentes en eritema en pabellón auricular externo derecho y dolor en articulación temporo-mandibular cuyas lesiones tardaron en curar cinco días».

A raíz del fallo judicial, el Comité levanta la suspensión cautelar al agresor, de 25 años, y le suspende con inhabilitación de cuatro años de competición oficial por la agresión «originando lesión o daño especialmente grave conforme al artículo 32.a del Reglamento de Régimen Disciplinario».

«Estoy satisfecho porque la Federación ha impuesto la mayor sanción posible», explicó ayer Orts, «y porque viene a reparar el contenido del fallo judicial». La sentencia del juzgado condenó al agresor a una indemnización de 200 euros por el daño causado y a una multa de ocho euros diarios durante dos meses. El autor del puñetazo, que reconoció los hechos en un escrito de alegaciones, no acudió al juicio.

Orts se mostró agradecido con «las innumerables muestras de solidaridad, apoyo y afecto» que ha recibido desde la agresión sufrida el pasado 3 de mayo. El colegiado alicantino, que se planteó abandonar el arbitraje tras el brutal puñetazo, ha reconsiderado su decisión y al menos este año va a continuar. De hecho, el pasado fin de semana ya dirigió el partido UCAM Murcia-Fuengirola en el arranque de la Primera Nacional y el próximo sábado arbitrará el Almería-Melilla. «El tiempo lo cura todo y ahora estoy más tranquilo al saber que esta persona no volverá a pisar una cancha en partido oficial», afirma.