El Club Deportivo Torrevieja y su exentrenador Gabi Correa, que fue destituido el pasado 14 de septiembre, aún no han llegado a un acuerdo para finiquitar el contrato del técnico uruguayo y mañana jueves, a partir de las seis de la tarde, hay previsto un acto de conciliación, en la Federación Valenciana, entre ambas partes, para intentar encontrar una solución.
Correa asegura que el club salinero no se ha puesto en contacto con él desde que tras el partido contra el Rayo Ibense el club le comunicara su destitución.
El preparador charrua, que como futbolista en activo fue mundialista en 1990 con su selección
lamenta las trabas que se encontró durante su corta etapa como entrenador del cuadro torrevejense. «Fueron todo problemas para llevar a cabo mi trabajo y he vivido una auténtica pesadilla desde la pretemporada».
Ahora, el técnico uruguayo aguarda a ver cuál es la postura de la entidad con respecto a la resolución de su contrato.
Pedreño está a la espera
En principio, y según la normativa, el último encuentro en el que el Torrevieja puede estar sin entrenador es el de este próximo fin de semana en Ontinyent, ya que nadie ocupó el banquillo el pasado domingo frente al Novelda, aunque Antonio Pedreño se perfila como posible sustituto y el pasado domingo ya estuvo dando algunas instrucciones a los jugadores desde la grada.
El técnico pilareño ya estuvo una campaña y media al frente del plantel salinero y nunca ha dejado de tener buena relación con la directiva.
Colistas de la clasificación
La situación clasificatoria del Club Deportivo Torrevieja es incómoda, ya que tras seis jornadas sólo ha cosechado un punto y cierra la tabla clasificatoria como colista del grupo.
Aunque los torrevejense ganaron su primer encuentro frente al Almoradí, la Federación Española se lo dio por perdido, por alineación indebida. En el resto de los cinco partidos disputados ha sumado un sólo punto, con un empate y cuatro derrotas. Encima, ahora, tiene una difícil salida al feudo del Ontinyent, equipo que marcha tercero en la clasificación y cuya aspiración es jugar promoción.
Además de los problemas con el anterior entrenador y con los resultados negativos, la semana pasada, también, fue especialmente convulsa en el seno de la entidad, ya que una parte de los jugadores aireó un duro comunicado contra la directiva, y ésta respondió, lo cual originó un nuevo comunicado del núcleo de jugadores disconformes con la gestión del presidente, Vicente Boix. Asimismo, se produjeron las bajas de Belforti y Vázquez, y la llegada del portero Buba.
