Rossi, con una vaselina desde fuera del área en el minuto 90, y una carrera del danés Pione Sisto en la siguiente acción, en la que regateó a medio equipo desde su campo, rompieron un partido en el descuento y sentenciaron al Espanyol, que bajó la guardia en los momentos críticos. Hasta entonces, catalanes y gallegos firmaban un justo empate a cero.