El estadio Philips de Eindhoven y un PSV muy similar al que doblegó en el decimosexto penalti en los octavos de final de la pasada temporada marcan el reinicio del Atlético de Madrid en su aventura en la Liga de Campeones, la mayor ambición del equipo, subcampeón en dos de las últimas tres ediciones.

Tres meses y medio después de la final perdida en la tanda de penaltis en Milán contra el Real Madrid; dos años más tarde de la final frente al mismo rival en Lisboa y con un desenlace cruel en la prórroga y 42 años de la derrota en un partido de desempate por el título del torneo contra el Bayern Múnich, el Atlético mantiene su persecución del trofeo que le falta en su palmarés, el más grande.

«Seguiremos luchando por un sueño común [la Liga de Campeones] que tenemos todos los atléticos», anunció este verano el uruguayo Diego Godín, cuando el equipo daba sus primeros pasos por la pretemporada en el complejo urbanístico de Los Ángeles de San Rafael (Segovia). Es el desafío del conjunto rojiblanco en esta temporada.

Ya lo ha acariciado dos veces desde que lo entrena el argentino Diego Simeone, ha eliminado en dos ocasiones al Barcelona en las tres últimas campañas, ha doblegado al Bayern en las semifinales del curso pasado, al Chelsea hace tres cursos en la misma ronda... Pero aún no ha tocado la cima. Ahora, inicia un nuevo asalto a la cumbre.

Y comienza en el estadio Philips de Eindhoven. Allí jugó y empató hace apenas seis meses en el encuentro de ida de la Champions del pasado ejercicio y allí le espera esta noche el PSV, actual campeón de Holanda, invicto en este curso -cuatro victorias y dos igualadas- y un rival exigente que ya ha mostrado su competitividad.

Es un partido clave. En un grupo en el que también están el Bayern Múnich y el Rostov, un comienzo con victoria en Holanda sería un paso adelante importante para el conjunto madrileño, reactivado con una segunda parte imponente, una victoria incontestable y cuatro goles el pasado sábado frente al Celta en Vigo (0-4).

Un impulso reconfortante para el Atlético, que se reencontró con el gol, la principal causa de sus dos empates anteriores frente a Alavés y Leganés, antes del estreno en esta edición de la Liga de Campeones, la cuarta seguida para el bloque dirigido por Simeone, en el que no se prevé apenas variaciones en el once para este martes con la única duda en ataque entre Fernando Torres o el francés Gameiro.