El Alcoyano quedó apeado de la Copa del rey víctima de un severo arbitraje que derivó en un contundente desenlace a favor del Toledo (4-0).

La superioridad del Deportivo quedó sesgada a los 12 minutos con la rigurosa expulsión de Jorge Hernández, el más destacado de su equipo. El colegiado, Santos Pargaña, le mostró la cartulina roja por abortar en campo propio el contragolpe conducido por Esparza.

Marc Martínez, ayer portero suplente, también resultó expulsado por protestar la decisión.

Jorge Hernández había participado en las dos acciones ofensivas de mayor peligro. En la primera, habilitando el balón a Mariano que no acertó a definir ante el portero Manolo, mientras que en la segunda el centro desde la línea de fondo buscando a Álvaro García acabó en saque de esquina.

El Toledo incrementó la posesión del balón pero el Deportivo mantuvo el tipo y no se descompuso hasta el descanso. El debutante Miguel Bañuz frustró la oportunidad más clara del conjunto local por medio de Esparza.

La incorporación de Owusu en el segundo acto revolucionó el ataque del Toledo y deparó el peor escenario para el cuadro alicantino que se vio desbordado una y otra vez en el área.

Pablo González definió con precisión ante Miguel Bañuz poniendo al Toledo con ventaja en el marcador, que pudo incrementar Owusu con un fortísimo disparo rechazado por el propio Bañuz.

El cuadro de Onésimo asestó un golpe letal con la segunda diana, obra de Roberto que alojó en la red el balón previamente despejado por Bañuz.

El ganés Owusu fabricó el tercero colocando el balón en el interior del área donde remató de cabeza Pablo González. Roberto desde la frontal del área estableció el resultado definitivo.