Néstor Abad (Alcoy, 1993) se estrenará como olímpico en los Juegos de Río de Janeiro a los que llega inmerso en el proyecto de ser un padre ejemplar tras haber alcanzado el éxito en la red social 'instagram' y convencido de haber encontrado su alimentación ideal como vegetariano.

Tras superar la segunda de sus dos graves lesiones en la rodilla derecha decidió lanzarse a conquistar las redes sociales para dar a conocer la gimnasia deportiva, una disciplina que, según denuncia, los medios abandonan tras cada cita olímpica.

«La gimnasia gana muchísimo protagonismo con los Juegos pero cuando han pasado se olvidan de todo», lamentó en una entrevista con Efe antes de volar a Río de Janeiro.

«Los Juegos son la competición más importante pero un Mundial también podría serlo y no lo transmiten por televisión», afirmó Abad.

«Después de la segunda operación de rodilla, en 2015, cuando volví a competir empecé a darle caña a las redes sociales porque parece que ahí la gimnasia no existía y tengo ganas de que la gente sepa lo que es. Suelo subir vídeos de entrenamientos y de ejercicios. Es lo que más impresiona», explicó Abad.

Con casi 10.000 seguidores en Instagram y cerca de 2.000 en Twitter y en Youtube, asegura que redoblará sus esfuerzos para popularizar su deporte.

«Tengo pensado moverme aún mucho más en las redes sociales para que todos conozcan y sepan lo que es la gimnasia», señaló Abad, que está encantado con la respuesta que ha tenido.

«Toda la gente que me escribe me dice cosas positivas, le gusta, flipan con los vídeos. Además es que es un momento, con menos de media hora, con un cuarto de hora al día tienes suficiente», aseguró. Pero las redes no sólo le sirven para ofrecer contenidos, también para recibir ofertas de trabajo. Abad ya ha jugado la liga italiana y puede que la próxima temporada debute en la alemana.

«Es una ayuda importante para poder mantenerte porque en España sólo con la gimnasia es muy difícil vivir. Los equipos contactan contigo por Facebook y te preguntan. Si te interesa y no coincide con otras competiciones, lo coges», explicó.

Pero más allá de las redes, Abad tiene en casa a su primer seguidor y también a su discípulo más precoz. «Tener un hijo es un cambio gigante, muy grande y en positivo. Cuando tienes un hijo quieres ser un ejemplo para él y quieres que sea como tú. Me hizo madurar mucho y saber lo que de verdad quería», señaló.

Abad reconoce que hace gimnasia por lo que hace sentir y los valores que da. «Me lo llevo a veces los sábados por la mañana y se queda flipado con lo que hago, antes me veía y no lo entendía mucho pero cada vez lo coge más», explicó

«De momento, a él le encanta saltar, escalar y hacer volteretas pero acaba reventado", apunta entre risas. Abad tiene también sus propios 'ejemplos' y los lleva tatuados, cada uno en un antebrazo.

«Llevo un samurai y un buda, el primero por su forma de vivir, por el honor y el sacrificio que les guía y el segundo para alcanzar sus ideas», razonó.

Entras las suyas está la de seguir una alimentación vegetariana. «Es un poco por ideología, pero no sólo por eso. Me gusta bastante el tema de la nutrición. Estuve una temporada muy interesado en eso hasta que logré entenderlo. La verdad es que comía bastante mal y ahora lo noto mucho, el cuerpo te lo agradece enseguida», aseguró el gimnasta alicantino.