La Real Federación Española de Taekwondo (RFET), negó este viernes a través de un comunicado que su presidente Jesús Castellanos se haya quedado con dinero procedente de subvenciones públicas destinadas a la entidad. Al mismo tiempo, exigió respeto a la presunción de inocencia de Castellanos y del resto de miembros de la Federación detenidos el pasado día 14 en una operación desarrollada por las unidades de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de Madrid y Alicante por los presuntos delitos de blanqueo y malversación de fondos.

En primer lugar, la Federación recalca «de forma contundente» que Castellanos, presidente de la Federación con sede en Alicante, nunca se ha quedado con dinero procedente de subvenciones. «Dicha afirmación», añade el comunicado federativo, «es rotundamente falsa y una falta irreparable hacia su persona y al resto de los miembros señalados en diferentes informaciones».

Asimismo, la RFET subraya que nunca ha realizado facturas falsas para desviar lo que recibía por organizar los campeonatos en Marina D´Or. «La Federación siempre firma un convenio con la citada empresa que, dependiendo de la importancia del campeonato, colabora o patrocina el mismo con una cantidad económica. Y, lo que es más importante, esa cantidad siempre se ingresa mediante transferencia bancaria en la cuenta de la propia Federación, por lo que no se desvía como afirmaban diversas informaciones», añade el organismo.

Más adelante, la RFET asegura que nunca ha cobrado cantidad alguna por homologar torneos. «Y, por lo tanto», apostilla, «es totalmente falso que haya quedado fuera de los apuntes contables federativos o que haya ido a parar a cargos de confianza del presidente» Jesús Castellanos.

Traslado de la sede a Alicante

El organismo federativo niega cualquier maniobra extraña con el traslado a Alicante de la sede de la Federación, al tiempo que recuerda que esa decisión fue aprobada por la Junta Directiva y por la Asamblea General.

La Federación insiste en la defensa de Castellanos, del que resalta que desde que llegó a la presidencia del organismo en 2005, «ha conseguido sanear una deuda cercana al millón de euros y logrado un superávit de 122.000 euros, como consta en la información aportada al Consejo Superior de Deportes».

Además, el organismo que preside Castellanos destaca que ha mantenido «la máxima colaboración con la UDEF y la administración de Justicia» desde que se puso en marcha la operación policial por el presunto blanqueo y malversación de fondos públicos.

«Esta denuncia se originó de forma interesada por una persona cuya credibilidad queda en entredicho tanto por sus actuaciones como por las reclamaciones presentadas y siempre desestimadas ante el Consejo Superior de Deportes», concluye el comunicado de la Federación.