La Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS) quiere seguir engrandeciendo su máxima competición y va a endurecer los requisitos a los equipos de Primera División para que puedan continuar en la máxima categoría. La intención es obligar a todos los equipos a tener pabellones con capacidad, como mínimo, de 2.000 espectadores con dos gradas que puedan albergar, al menos, a 700 aficionados en cada una. También va a requerir una iluminación potente que permita las retransmisiones televisivas, así como un buen tiro de cámara.

Además, la LNFS está intentando involucrar a los clubes de fútbol para que tengan secciones de fútbol sala y así tener un mayor atractivo para los espectadores. En ese sentido, Inter Movistar ya está trabajando con el Atlético de Madrid para que se haga cargo de su equipo de fútbol sala. Se está intentando convencer al Real Madrid para que también forme equipo y se una a otros como el Barcelona o el Elche. Incluso se está muy pendiente de que los clubes de fútbol sala no cometan irregularidades a la hora de pagar a los jugadores y que todos los contratos sean oficiales y no haya pagos en dinero en B, como, se sospecha, que ha ocurrido en algunos casos a lo largo de esta última temporada..

El presidente de la Liga Nacional de Fútbol Sala y exseleccionador nacional, Javier Lozano, ya tuvo la oportunidad de informar de todas estas nuevas normas que van a llevar a cabo al consejero del Elche Ramón Segarra, que ha estado muy vinculado a la sección franjiverde de fútbol sala debido al patrocinio de la empresa Los Serranos, durante uno de los encuentros del conjunto ilicitano en los que estuvo presente.

En ese sentido, las miradas desde Madrid apuntan al Lobelle Santiago, al Jumilla, incluso al DKV Zaragoza.

Ante esta situación, Lozano explicó a Segarra de la importancia de que, en caso de descenso, como le ha ocurrido al Elche, sería importante terminar penúltimo en vez de último, porque, de esa forma, tendrían más oportunidades de repescarlos en el caso de que algún equipo no cumpla los requisitos.

Los ilicitanos han cumplido esa premisa porque terminaron la Liga regular por delante del UMA Antequera y tienen opciones de poder seguir la próxima temporada en Primera División.

El Levante sí que va a continuar

Uno de los equipos que parecía que iba a tener difícil seguir en la máxima categoría, después del descenso de su equipo de fútbol 11 a Segunda, es el Levante UDDM. Pero parece ser que el club granota, a pesar de que la temporada próxima va a disminuir considerablemente sus ingresos en Segunda División, está dispuesto a continuar con la sección de fútbol.

El conjunto valenciano también tenía problemas para cumplir los requisitos del pabellón, porque las instalaciones deportivas de El Cabanyal, donde ha jugado esta temporada, no las cumple. Pero, al final, todo hace indicar que se trasladará a Mislata a disputar sus encuentros.