El Elche jugó, por tercera vez en la temporada, con su tercera equipación, la rojigualda, que se confeccionó para agradecer el apoyo recibidos desde todos los rincones de España tras el descenso administrativo. Hasta el pasado sábado, la camiseta con los colores de España no había dado mucha suerte. En las dos primeras veces que la vistieron, en Ponferrada (2-0) y en Oviedo (3-0) fue gafe, pero en Tenerife se rompió la mala racha y sumó su primer punto con la rojigualda.