La peña de aficionados del CD Torrevieja de Tercera División, el Frente Salinero, ha expresado su opinión sobre la situación económica por la que atraviesa el club y que incluso provocó una sentada de sus jugadores en el último encuentro en casa ante el Recambios Colón de Sedaví. El sentir general de esta agrupación de seguidores, que nació en 2.009, se resume en que «deploramos la lamentable situación economica del club, y agradecemos a la plantilla su profesionalidad en estos momentos tan difíciles». Cabe recordar que se debe a los jugadores alrededor de cuatro mensualidades. Por este motivo, desde el Frente Salinero se asevera que «constatamos la cruda realidad de que sin un proyecto económico solvente y realista no se puede planificar nada en aras de alcanzar objetivos deportivos. Creemos que ha llegado el momento de un cambio de proyecto en la dirección de la entidad, que aporte estabilidad al club y le permita crecer en los ámbitos material, deportivo y social. En la nueva etapa hacen falta nuevas personas, nuevas ideas e impulsar definitivamente la cantera local. Agradecemos al presidente Vicente Boix su entrega y dedicación todos estas campañas en las que ha estado al frente de la entidad haciendo una gran labor, y le pedimos un último esfuerzo de generosidad por el bien del club, facilitando la transición a esta nueva etapa».
Es tal la preocupación de la peña que sus componentes organizaron una reunión de urgencia realizada la semana pasada para abordar esta cuestión. Cabe recordar que Celedonio Perea es el actual presidente de la misma, y que entró a ocupar la presidencia sustituyendo al inicio de la temporada a Inma Pamies.
No obstante, Perea reconoce que «a pesar de que el club conoce nuestro malestar, de momento no nos ha mostrado ningún atisbo de reacción y todo continúa de la misma manera"»
En cuanto a lo meramente deportivo, la plantilla continúa sin entrenar a nivel colectivo para ahorrar gastos de desplazamiento, y este domingo el conjunto salinero recibe la visita del Jove Español. Mientras que los salineros no se juegan nada, el equipo visitante, de San Vicente del Raspeig, se juega la vida, ya que lucha por escapar del descenso.
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