El jugador del Almoradí Kike Granados se expone a una sanción, que puede oscilar entre 15 y 25 partidos, por la agresión e insultos que propició al árbitro, Morales Lorente, que dirigió el partido de Preferente entre el Villajoyosa y el Almoradí (1-2). El colegiado tuvo que dedicar cerca de una hora y media a la redacción del acta, en la que reflejó todo lo que sucedió, tanto dentro como fuera del terreno de juego, ya que el futbolista no solo fue el protagonista de la agresión, sino que, además, insultó y esperó al propio árbitro en el túnel de vestuarios.

El delegado del Colegio de Árbitros de Benidorm, al que pertence Morales Lorente, y padre del colegiado de Primera División, Martínez Munuera, Juan Ramón Martínez, estuvo presente en el momento de los hechos, ya que se encontraba en la grada del campo El Pla de Villajoyosa, y asegura que nunca ha visto nada igual en sus 40 años en el mundo del arbitraje. «No llego a entender esa actitud».

Además, el delegado de árbitros asegura que Morales Lorente «tenía el partido controlado. No había ningún problema y el arbitraje cumplió con la normativa en el momento de la jugada en la que se lesionó Kike Granados».

Por su parte, el jugador, que ha manifestado su arrepentimiento por lo ocurrido, se expone a una sanción que podría acabar con su carrera futbolística. Kike Granados tiene 33 años y arrastra molestias preocupantes por las lesiones que sufrió durante el partido.

Ahora será el Comité de Disciplina de la Federación Valenciana de Fútbol, que reúne el míercoles, el que determinará la sanción.

Los miembros del Comité deberán cuantificar los numerosos insultos en el momento y después de la expulsión, la agresión al colegiado reflejada en el acta como «un cabezazo en la boca» y otra tentativa de agresión dentro del túnel de vestuarios, que evitaron los delegados de ambos equipos.

Aunque ninguna de las fuentes consultadas se han atrevido a cuantificar la posible sanción, todos prevén que será castigado los cuatro hechos reflejados en el acta: conducta agresiva, insultos, agresión y la conducta dento del vestuario. Es decir, entre 15 y 25 partidos teniendo en cuenta otras sanciones similares.

Kike Granados reconoce todo lo acontecido en Villajoyosa y espera comprensión debido a la lesión que sufrió en ese partido. El almoradidense tuvo que visitar un Hospital para que los facultativos valorasen las lesiones en la rodilla sufridas.