El FC Barcelona Lassa, ante un público muy especial compuesto por 4.000 niños de centros escolares que llenaban las gradas del Palau Blaugrana, venció ayer al BM Benidorm por 33-18. Sin duda alguna los protagonistas fueron los niños y niñas presentes, para muchos en su primera presencia en el Palau Blaugrana, que no pararon de animar dieron colorido a las gradas.

Siguiendo su plan de rotaciones, Xavi Pascual, técnico azulgrana, dio descanso al extremo izquierdo Gudjon Sigurdsson, al lateral checo Filip Jicha y al lateral derecho croata Marko Kopljar, cerrando así el ciclo de preparación del trascendental encuentro de ida de cuartos de final de la Liga de Campeones que el próximo domingo (19.30 horas) disputará ante del THW Kiel alemán.

Al Barcelona le costó poco romper la línea de contención alicantina y con 7-2 (m.12). Latorre pidió tiempo. El Benidorm recortaba distancias (11-7, m.24) en los mejores minutos del veterano meta Diego Moyano, de 45 años y que hoy disputaba el encuentro 501 en Liga Asobal.

Tras el 15-10 al descanso, el Barcelona salió relajado y el Benidorm, con Salinas sobre Dani Sarmiemto para presionar la línea de pase barcelonista, recuperaba diferencias por medio de Carlos Grau (16-13, m.27)

La tónica se mantendría hasta el 18-15 (m.43), marcado por el francés Fabien Brive, pero el Barcelona volvió a apretar en el acelerador en ataque y se cerró mejor en defensa. De nada sirvió un tiempo de Latorre (21-15, m.46) porque un parcial de 6-0 daba la máxima ventaja hasta entonces a los de Pascual (24-15, m.48).

El equipo visitante bajó ya los brazos y los catalanes siguieron ampliando su ventaja hasta el 33-18 final, marcado en el enésimo contragolpe culminado por Aitor Ariño, máximo goleador del partido con ocho tantos.