Después de la importante victoria conseguida por el Orihuela ante el Castellón por 4-2 en el campo de Los Arcos, la asignatura pendiente del entrenador del conjunto de la Vega Baja, Frank Castelló, sigue estando fuera de casa después. Desde su llegada, el Orihuela ha ganado de forma solvente los tres partidos que ha disputado como local al Muro, Torrevieja y Castellón (1-0, 3-0 y 4-2, respectivamente), pero sólo ha sacado un punto de los 9 que ha disputado a domicilio, con dos derrotas en Novelda y Elche por 2-0 y 4-2, respectivamente, y un empate sin goles en Crevillent.

El primer examen lo tendrá este próximo fin de semana ante el Torre Levente, donde sólo cabe un triunfo para seguir manteniendo las opciones de meterse en promoción de ascenso a Segunda División B.

Precisamente esta jornada que viene va ser decisiva no sólo para los oriolano, sino también para el resto de equipos que están luchando por una de las cuatro primeras plazas que permiten disputar los play off de ascenso.

El Orihuela viaja a Orriols para enfrentarse al Torre Levante que es un rival directo en la tabla, mientras que el Castellón y el Elche Ilicitano, cuarto y tercero respectivamente, se enfrentan entre ellos. Esto quiere decir que una derrota del Castellón y una victoria oriolana, supondría un acercamiento a la zona de privilegio de cuatro puntos a falta de seis partidos para terminar la competición, y el conjunto amarillo se metería de lleno otra vez en la lucha por el ascenso.

El Torre Levante se encuentra situado en la sexta posición con 48 puntos, mientras que el Orihuela es noveno con 46. Sólo les separan dos puntos en un partido en el que están en juego tres puntos.

Ante este panorama, Castelló no sólo se juega conseguir su primera victoria como visitante, sino también incrementar sus opciones de jugar la promoción en un fin de semana en el que puede verse favorecido por los resultados de los contrarios.

Esta semana la plantilla va a trabajar duro consciente de que tiene delante un partido decisivo para su futuro.