Colea en el Balonmano Benidorm la actuación de los colegiados andaluces Fernández Pérez y García Rodríguez en el Palau el pasaso sábado con motivo del partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey, ante el Ademar León. Ayer el club remitía al comité de árbitros una protesta, adjuntando un vídeo con 16 jugadas en las que los colegiados perjudicaron claramente al equipo de Latorre.

El presidente de la entidad Javier Abinzano señalaba ayer que «hay algo en la actuación de los colegiados que no entiende nadie y por ello queremos dar un toque de atención al comité arbitral y a la propia Federación, porque no trataron a los dos equipos con el mismo rasero. No puedo entender la animadversión hacia los nuestros, incluido nuestro delegado. He estado viendo detenidamente los cortes del partido y hay cosas que son incomprensibles y no estamos dispuestos a que nos traten así. Sabemos que puede haber errores en un partido, pero no una reincidencia en ellos y siempre a favor de un equipo».

Abizano, muy enfadado, añadía: «Sabíamos que la eliminatoria estaba perdida, pero queríamos salir a jugar, disfrutar de una buena tarde de balonmano y no nos dejaron. Nosotros somos un equipo humilde, que trabajamos día a día por este deporte y lo que queremos es que cosas como estas no nos vuelvan a pasar, ni a nosotros ni a ningún otro club y por eso lo estamos denunciando».

El presidente decía también que «no es quejarse por quejarse, yo en estos momentos me siento desbordado, fuimos ninguneados, así que nos vamos a poner en contacto con la Federación Valenciana para que nos digan qué podemos hacer, tratamos de que esto no nos pase factura en el futuro, además de que nos estropeasen una buena tarde de balonmano y por ello queremos que se nos escuche, con pruebas y que nos den su opinión».

Por su parte, el técnico Latorre, al que también expulsaron, sólo pide respeto: «Aseguran que les dije 'no me lo creo, no me lo creo', cuando no es cierto y con el griterio que había en el Palau además no podían oirme. Somos un equipo recién ascendido, pero nos merecemos el mismo respeto que un Ademar o un Granollers si queremos tener una liga competitiva. Me dijeron que hacía cuatro años que no pitaban en León porque la última vez que lo hicieron ganó el equipo contrario y seguramente protestaría el Ademar. Pienso que ahora nosotros tampoco podemos callar», censuró.