Ea exseleccionadora española de natación sincronizada y actual seleccionadora de Ucrania, Anna Tarrés, ha apuntado que «la vanidad y el odio» hacia ella del actual equipo técnico de la Federación Española (RFEN) «se les ha vuelto en contra» con el fiasco olímpico para Río de Janeiro, al tiempo que ha lamentado que Ona Carbonell se haya «borrado» y que se lo hayan «permitido».

«Por el equipo técnico no me da nada de pena. Por Fernando Carpena (presidente de la RFEN), cero pena. Ana Montero y Ester Jaumá tampoco me dan pena. No me dan pena porque han sido gente arrogante, que han menospreciado nuestro trabajo, que no han querido saber nada de nosotros y que nos han machacado públicamente. Esa vanidad y ese odio hacia nosotros ahora se les ha vuelto en contra», criticó Tarrés. La barcelonesa se confesó «triste» porque «las horas de trabajo y el esfuerzo» que ella desarrolló durante su etapa como seleccionadora español, igual que el «dinero invertido y los esfuerzos personales de muchísima gente», incluidas las propias nadadoras, «se han ido al traste».

Ona se defiende

La nadadora y capitana del equipo español de natación sincronizada, Ona Carbonell, ha asegurado que «no» se ha «borrado» de las pruebas colectivas, donde el equipo ha quedado fuera de la cita olímpica, tal y como señaló la exseleccionadora nacional Anna Tarrés. «Estamos aquí para construir y no para destruir. Mi objetivo para construir es estar dentro del agua y competir al máximo nivel. Yo no me he borrado, acato las indicaciones del equipo técnico, como cualquier corrección de los entrenadores», señaló en declaraciones a los medios nada más aterrizar procedente de Río.