El entrenador del Orihuela, Frank Castelló no arroja la toalla y no se rinde a pesar de la situación en la que se encuentra su equipo de cara a lograr el objetivo del club de jugar la promoción de ascenso a Segunda División B.

El técnico es consciente de que resulta casi imposible alcanzar una de las cuatro primeras plazas una vez que la distancia es de diez puntos a falta de once jornadas para terminar la liga. Sin embargo, asegura que «mientras tengamos una opción la vamos a buscar y no diremos adiós a la promoción hasta cuando se imposible».

La derrota por 2-0 en Novelda ha dejado el objetivo «muy difícil, pero, al final, esto son números y nosotros lo vamos a intentar. Seguimos con ilusión, trabajando igual y con el mismo interés de ganar todos los partidos. Vamos a tratar de sumar el máximo posible de partidos de aquí a final de Liga y la clasificación dirá dónde tenemos que estar», insistió.

Castelló admitió que tras la derrota de Novelda «nos venimos abajo todos», pero recordó que desde su llegada se planteó «cada tres jornadas sumar siete puntos para tener opciones de estar arriba. Si conseguimos sumar los tres puntos contra el Torrevieja solo estaremos un punto por debajo de la previsión y, aunque el calendario es muy complicado ahora, tenemos que hacer esa máxima, y si somos capaces de hacerla no parece que el objetivo sea tan difícil mirándolo así».

El preparador también cree que en el Orihuela actualmente «tenemos bastante margen de mejora. No es lo mismo ver al equipo desde la grada que ver el día a día de los jugadores, y lo que nosotros sabemos es que hay que cambiar el chip y ser mucho más agresivos, correr muchísimo, dejarnos de florituras e ir a lo práctico. Tenemos que ser un equipo duro y difícil, y mantener la portería a cero».

Con respecto al partido de Novelda, Castelló apunto a la «falta de acierto» como principal motivo de la derrota. «Las ocasiones que tuvimos no supimos materializarlas y ellos no dispararon a portería casi nada. Teníamos el partido muy controlado y sin situación de riesgo atrás. El gol fue una jugada accidentada y a partir de ahí les metimos atrás y tuvimos nuestras opciones, y en una de esas acciones, en una contra, llegó el 2-0. No teníamos que haber perdido el partido en ningún momento», sentenció.