La guerra entre el Jove Español y el Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig es total y no tiene visos de solucionarse a corto plazo. Desde el club de fútbol lanzan graves ataques dirigidos al concejal de Deportes, José Luis Lorenzo, al que acusan de perseguir y querer dañar a la entidad al no haber accedido a la petición inicial de colocar a un amigo suyo en la comisión técnica y de pretender arrebatarle las categorías inferiores al Jove para crear una escuela municipal con la intención de dirigirla en un futuro cercano. Sobre este punto, el vicepresidente segundo del club sanvicentero, Rafael Beviá, hace hincapié en la formación que tiene Lorenzo como entrenador de fútbol base.
El último capítulo en el conflicto que mantienen Jove y Ayuntamiento viene provocado por las subvenciones públicas que debe recibir el club. El martes se le comunicó que la ayuda correspondiente a esta temporada será, como máximo, de 40.000 euros, lo que supone casi un 50% menos que lo que venía recibiendo durante los últimos años. «La campaña está muy avanzada, cobraremos la mitad de la subvención en junio y la otra mitad en diciembre. Ante esto, nos quedamos en una situación muy crítica. Somos conscientes de que no podemos funcionar en base a las ayudas públicas pero el problema es que nos prometieron unas cantidades que ahora sufraga el presidente -José María Mena- de su bolsillo», lamenta Beviá.
Más allá del asunto de la subvención que ha estallado esta semana, los problemas más graves vienen de lejos, desde las primeras reuniones mantenidas por la directiva del Jove y la concejalía que dirige Lorenzo. «En uno de los encuentros iniciales que mantuvimos dejó entrever quién debía ser nuestro secretario técnico. Posteriormente nos dijo que un porcentaje de la publicidad del campo de fútbol tenía que ir a parar al Ayuntamiento», describe el vicepresidente del club.
Lorenzo ofrece su versión sobre esta acusación del Jove. «Lo único que les he dicho es que trabajen con buenos coordinadores de cantera, como les he pedido que busquen a grandes empresarios o profesionales reconocidos en el mundo del fútbol. No les he hecho comentarios para imponerles a mis amigos. En el Ayuntamiento hemos cambiado la forma de trabajar y el Jove tiene que adaptarse a la nueva política de subvenciones. Tienen que ser conscientes de que juegan en suelo público pagado por los sanvicenteros. El día que tengan su estadio, cambiarán las cosas», indica.
En una reunión posterior, en la que por parte del Jove acudieron el presidente Mena, Beviá, los también vicepresidentes Miguel Fernández y Antonio Martínez y Manuel Conca, persona externa a la entidad, se produjo una de las conversaciones que más retrata a Lorenzo, según las palabras de Beviá. «Le presentamos el proyecto para la cantera y el primer equipo. Nos dijo que le parecía interesante pero que había que hacer otro planteamiento. Él quiere crear una escuela municipal. Para ello nos pidió que le entreguemos nuestro fútbol base. A cambio prometió agilizar la subvención», señala el directivo.
El concejal también se defiende de esta segunda acusación: «Lo único que les he dicho es que si no son capaces de destinar el dinero público a la cantera, nos den la posibilidad de acoger a los chavales de San Vicente bajo el paraguas del Patronato. El Jove recibe tres o cuatro veces más dinero que el Hércules San Vicente, que este fin de semana ha tenido que viajar hasta Ferrol, o que el Patín Raspeig, que también recorre muchos kilómetros para disputar sus encuentros. Nosotros no podemos aportar el 80% del presupuesto del club».
Los reproches entre Lorenzo y el Jove van en ambas direcciones. La principal queja del responsable de Deportes es que el club dedica la mayoría de la subvención al primer equipo y no lo destina a los más pequeños. «Les damos el dinero para los niños de San Vicente, no para que paguen los costes de la plantilla de Tercera División. Reciben mucha ayuda pública y debemos saber a qué la destinan. No repercute ni un euro en los jóvenes, no pagan por el campo ni por ninguna instalación, lo quieren todo gratis», concluye.
Beviá también lanza un último dardo a Lorenzo: «Quiero pensar que no hace todo esto porque cuando era entrenador en categorías inferiores no fue contratado por el Jove. Lo que buscamos es que dimita por estas cuestiones, todas demostrables con los testigos que tenemos. Nos acusa de vender humo y de ser unos ilusos, cuando hemos hecho mucho por el deporte de San Vicente y le hemos dado impulso al club».
