La ausencia del gol es el único pero que puede ponerse al encuentro con el que ayer deleitaron el Alcoyano y el Lleida Esportiu a los cerca de 2.000 aficionados que se dieron cita en el campo de El Collao.

Ambos equipos afrontaron con mucho respeto el primer acto conscientes de la importancia de los puntos en juego, si bien el cuadro catalán, con el viento a favor, dispuso de más control del balón.

Andrés Palop, entrenador del Alcoyano, se vio obligado a recomponer el «once» por la falta de delantero de referencia. Y es que, a la baja de Yacine y Borja Sánchez, se unió a última hora la de Álex Cortell aquejado de un cólico nefrítico. Así, Alfaro jugó de falso «9», mientras que Rubén Ramos se vio desplazado a la banda derecha para ceder la mediapunta a Javi Rubio. El rompecabezas no funcionó.

Los primeros minutos se desarrollaron en el terreno local hasta que el Deportivo encontró una fisura por la banda derecha para sacudirse el buen posicionamiento del Lleida. Mode, con un centro preciso, provocó el primer remate a puerta a cargo de Javi Rubio, algo desviado.

Poco después, Arnau se anticipó a Víctor Mongil en el segundo palo abortando una clara situación para el central vallisoletano.

El Lleida Esportiu, más cómodo que el anfitrión, estiró líneas en el tramo final de la primera parte y generó sus mejores oportunidades. Urko Arroyo disparó con potencia con la fortuna de que el balón impactó en la cabeza de Fran Miranda y se fue a saque de esquina.

Al filo del descanso El Collao enmudeció. Marc Martínez enganchó una soberbia volea estrellando el balón en el travesaño de la portería de su homónimo.

El segundo acto arrancó con polémica puesto que el colegiado pasó por alto el contacto en el interior del área del portero Crespo con el extremo Liberto Beltrán.

El equipo de Palop, con las líneas más compactas, avisó de nuevo con dos centros cerrados de Liberto Beltrán y Rubén Ramos que Crespo, atento, envió a córner.

La rigurosa expulsión del mediocentro Fran Miranda (68') por doble amonestación acrecentó el dominio de Lleida, aunque el Alcoyano no le perdió la cara al encuentro y gestó al contragolpe algunas situaciones de peligro.

Alfaro disparó excesivamente cruzado en una posición inmejorable dentro del área. Liberto Beltrán, por su parte, remató en el primer palo un centro de Mode que repelido por la base del poste acabó en las manos del portero.

El colegiado, con el tiempo cumplido, anuló un gol al exalcoyanista Carlos Rodríguez al interpretar que el punta se encontraba en fuera de juego.

El encuentro ya no dio para más y los dos equipos se retiraron a los vestuarios satisfechos por el punto conseguido. Los catalanes se afianzaron en la tercera posición, mientras que el Deportivo regresó a los puestos de promoción de ascenso beneficiado por la derrota del Hércules frente al Barcelona B.

El Alcoyano volverá a jugar otro partido clave el próximo domingo en el estadio municipal de Reus (12.00 horas).