La recuperación de Marcelo, lesionado de un hombro, es clave para el técnico del Madrid Zidane, pendiente al detalle de cada paso que da hacia su regreso el lateral, que deja con su ausencia una situación compleja sin un sustituto en la plantilla. La primera prueba de Zidane sin Marcelo fue cambiar de banda a Carvajal. «Sabemos que no es la demarcación que más le gusta», admitió, pero ante el Athletic la necesidad le llevó a probar con vistas a Roma y la ida de los cuartos de Liga de Campeones. La falta de confianza de Danilo, que había jugado en Sevilla ante el Betis en el único pinchazo desde la llegada de Zidane, impidió que fuese el brasileño el que ocupase el costado izquierdo, como ya ha hecho en otras ocasiones en su carrera. efe madrid