Algunos salen a correr y otros hacen running, pero la pasión por este ejercicio físico es una realidad en Alicante, donde existen numerosas comunidades organizadas en forma de club. Algunos ejemplos son el Urban Runner'sClub, del Club Atlético Montemar, o el Club EP Running, que ha llegado recientemente a la capital pero ya existía en la Marina Baixa. A estos se añaden los clubs de atletismo, como el Apolana, que incluyen las carreras de fondo en su abanico de actividades. Sin ir más lejos, Atletismo Alicante ofrece en su página web grupos de entrenamiento asesorado desde 50 euros al año.

Adrián Onandía, entrenador del Apolana, incidía sobre la necesidad de preparar bien el recorrido antes de salir a ejercitarse. «La superficie juega un papel importante en el desgaste físico. Muchos runners corren principalmente sobre asfalto, pero son más recomendables terrenos blandos, como césped o tierra», asegura. «Además, uno de los grandes inconvenientes de Alicante es que hay muchos cruces con semáforos, que cortan el ritmo de los corredores. Por eso es habitual verles por zonas como la playa o el monte Orgegia, que tiene muchos caminos de tierra». Tampoco las pistas de atletismo, paradójicamente, son ideales para realizar carrera durante un tiempo prolongado. Susana Segrelles, entrenadora de atletismo, también mencionaba la Albufera o las pistas del Hipódromo como lugares ideales para este ejercicio, por sus superficies más adecuadas para la práctica del running.

Equipamiento

Aunque correr es uno de los deportes supuestamente más baratos, ya que necesitas poco material para empezar, la realidad es que gran parte del colectivo de runners «está muy tecnificado», en palabras de Segrelles. «Cuando acaban de empezar sí que pueden dejarse llevar más por el precio o el color de las zapatillas, pero rápidamente se ponen a la última, y llevan desde calzado especializado a camisetas térmicas», además de gadgets «para medirse las pulsaciones o controlar la distancia recorrida». Onandía recomienda dejarse asesorar por un experto a la hora de adquirir el equipamiento inicial, ya que «hay muchas cosas en las que fijarse, como el peso del corredor, la amortiguación de la zapatilla, el entrenamiento que quiere hacer o el tipo de superficie sobre el que se ejercitará».

Las variantes también están expandiéndose, de modo que ya es muy habitual que los runners salgan a correr en grupo, lo que «aumenta la motivación y es un modo de socializar», según Segrelles. Esa tendencia tiene una gran sinergia con los clubes de running anteriormente mencionados. Otra opción es correr por la noche, algo que «la temperatura de Alicante permite todo el año», pero tiene inconvenientes como «la poca visibilidad o el alto grado de activación del cuerpo cuando, tras el ejercicio, nos vamos a dormir», por lo que Segrelles prefiere «entrenar por la mañana».

Salud

A pesar de los cuantiosos beneficios para la salud que tiene correr, su práctica, sobre todo con calzado inadecuado, excesiva intensidad o sobre un terreno duro como el asfalto, puede llevar a lesiones. «Las más habituales son la tendinitis y la periostitis», afirma Segrelles. Onandía aconseja, además de consultar con un fisioterapeuta, acudir «al podólogo», que puede darnos soluciones para no volver a lesionarnos.

David García, fisio deportivo que ha trabajado en España y Francia, añadió a la lista las contracturas musculares, y afirmó que, pese a que los consejos más habituales contra las lesiones son de sobra conocidos por los deportistas (controlar la alimentación, cuidar el calzado, hidratarse, estirar, tener una buena técnica de carrera o respetar los descansos) no siempre se aplican, lo que termina repercutiendo sobre el cuerpo. Asimismo, realzó la importancia de «tener un buen plan de entrenamiento para respetar las cargas de trabajo» y recalcó que no es necesario estar lesionado para acudir a un profesional, aunque sea sólo como prevención.