Felipe Orts logró ayer, en la localidad belga de Heusden Zolder, la sexta posición en el Mundial de sub'23, cruzando la línea de meta solamente 15 segundos más tarde que el ganador, el belga Eli Iserbyt. Orts llegó a ir segundo, en una jornada de lluvia, frío y barro, ciclocross puro, ante 80.000 espectadores de pago, tras el primer ataque de Daan Soete. «Se fue el belga y todos se pararon. Arranqué tras él para ver qué pasaba. Rodé como media vuelta segundo, pero estaba claro que no iba a ser algo definitivo», recuerda el ciclista de Villajoyosa. Luego, corriendo de forma muy inteligente, se mantuvo en el grupo perseguidor, sin derrochar fuerzas, «aguantando, para terminar con un sexto puesto que me deja más contento que nada», insistía.

«Sabía que llegaba muy bien de forma y de moral, pero un Mundial es un Mundial y más como éste, en el que un fallo te podía costar diez posiciones. Solamente tuve un problema, que me quedé sin frenos, pero enseguida pude cambiar de bicicleta y no me perjudicó nada. Alguna caída tonta, pero sin más, lo normal en ciclocross. Estuve en todo momento donde quería, haciendo la carrera que me convenía».

Su rendimiento deja muy altas sus expectativas de cara al futuro, teniendo en cuenta que la decimocuarta plaza de Delio Fernández en Pont Château 2004 era el resultado más parecido al suyo de un español hasta la fecha. «No estamos tan lejos de los de delante y con los medios adecuados podemos estar luchando por algo más. Aún me queda un año en la categoría y vamos a por más. Y subir un pasito más, que es posible, supone meterse en la pelea», concluye el actual campeón de España de la categoría.