Los delanteros Abraham y Álex Rubio rescindieron ayer sus respectivos contratos con el Alcoyano puesto que habían dejado de contar para el técnico, Andrés Palop.

El canario Abraham, anunciado el pasado mes de julio como el fichaje estrella, no llegó a aclimatarse al sistema de juego de Palop, que le exigía más sacrificio y solidaridad en el repliegue. Abraham, firmado para dos temporadas, se despidió del Alcoyano con una bagaje de 869 minutos y ningún gol. El destino del extremo podría ser el Sabadell club del que curiosamente procede Álex Cortell, el primer y único fichaje hasta el momento del mercado invernal.

El sub-23 Álex Rubio, por su parte, tampoco se erigió en alternativa fiable de Yacine, pese a firmar el «hat-trick» contra el Reus que catapultó al Deportivo a la zona de promoción. El punta sevillano volvió a marca su cuarto y último gol frente al Olímpic.

Rubio, por otro lado, protagonizó dos incidentes fruto de su fuerte carácter que prácticamente sentenciaron su salida. Escupió a un rival que previamente le había agredido y, sin duda lo más grave, se mostró apático cuando Palop le ordenó calentar en el tramo final del encuentro contra el Huracán.

El Alcoyano dispone de dos fichas para completar el plantel.