­El Orihuela se acerca más a los puestos de promoción de ascenso tras superar al colista Acero por 3-1 en un flojo partido en el que el equipo de Gabi Correa mostró una preocupante falta de intensidad en la segunda parte tras marcharse al descanso con un claro 2-0, que permitió a los visitantes meterse en el encuentro y acercarse al empate. Un gol en el último minuto del descuento puso el 3-1 definitivo y llevó la tranquilidad a las gradas de Los Arcos.

La primera parte estuvo dominada por completo por el Orihuela en un monólogo futbolístico en el que el control del partido fue absoluto de los oriolanos. El Acero sólo logró pasar del centro del campo una vez en el primer tiempo, mientras que los hombres de Gabi Correa intentaban continuamente generar ocasiones de gol desde todas las posiciones posibles.

A los cinco minutos, Ginés cabeceó fuera en el primer aviso, pero el empate no se rompió hasta el minuto 26 en el que Mikey marcó un golazo en un lanzamiento de falta. Antes del desdanso, Ginés lograba el 2-0 a aprovechar un centro desde la banda derecha.

Tras el descanso, el Orihuela bajó los brazos y su falta de intensidad propició que el rival se metiera en el partido y acortara distancias en el minuto 74 en una rápida jugada de contragolpe. El Acero buscó el empate, pero sus ilusiones se acabaron cuando en el minuto 94, al filo del final, Raúl conseguía aumentar distancias en un partido que nunca se le debió complicar al conjunto escorpión debido a su manifiesta superioridad.