El Rally Dakar, el considerado «raid» más duro del mundo y que se disputa en esta edición 2016 únicamente por Argentina y Bolivia, comenzó ayer con una etapa prólogo en Buenos Aires y con Joan Barreda (Honda), en motos, y Joan Roma (Mini) y Carlos Sainz (Peugeot), en coches, como las principales bazas. De hecho, Barreda (Honda) se adjudicó ayer el prólogo en un especial de apenas 11 kilómetros que marcó el inicio de esta 38 edición de la prueba.

Con un tiempo de 6:27 minutos, el piloto de Torreblanca (Castellón) marcó el mejor tiempo de una especial muy corta que comenzó en la ciudad bonaerense de Arrecifes en un trazado total de 335 kilómetros entre Buenos Aires y Rosario. Tras el podio de presentación y este prólogo de apenas 11 kilómetros, este domingo se realizará la primera etapa formal, entre Rosario y Villa Carlos Paz, con un especial de 227 kilómetros para quads y motos en un trazado total de 632 kilómetros.

La organización se ha tenido que reinventar para diseñar un nuevo recorrido del Dakar en Sudamérica tras la renuncia de Chile, y su siempre temible paso por el desierto de Atacama, por las inundaciones que vivió el país a inicios de 2015. En agosto, fue Perú la que se dio de baja después de que el Gobierno prefiriese destinar sus esfuerzos por el posible impacto entonces de «El Niño» en el país.

De este modo, los organizadores tuvieron que retocar su diseño sobre la marcha y dejar que los participantes asuman los desafíos que presentan Argentina y Bolivia y los más de 9.000 kilómetros que deberán completar, donde la velocidad será más importante en esta ocasión y donde los aspirantes deberán superar principalmente el reto de la altitud del país boliviano, con su punto culmen en los 4.600 metros. En la segunda semana será cuando aparezcan las dunas, sobre todo las de Fiambalá, uno de los puntos decisivos de un «raid» donde la fiabilidad y resistencia, tanto de vehículo como de piloto, serán claves.

Nuevo panorama

En motos, se abre un panorama nuevo para sus participantes. El español Marc Coma, ganador el año pasado y otras tres veces más, anunció su retirada para enrolarse en la dirección del «raid». Con su marcha y el paso ya el año pasado a los coches del francés Cyril Despres, las dos ruedas no contarán con ninguno de sus diez últimos ganadores. Por ello, sin ningún ganador en la línea de salida, el abanico de favorito se ha ampliado y es más incierto, aunque tanto KTM como Honda parten con ventaja sobre sus rivales.