Un Barcelona muy serio desarmó este domingo al actual campeón de Liga, el Real Madrid, al que volvió a ganar a domicilio (84-91) en el Palacio de los Deportes, donde acumulaba cinco derrotas consecutivas en Liga regular.

En el primer clásico de la temporada, el equipo de Xavi Pascual evidenció que esta vez tiene un bloque más sólido para intentar romper la hegemonía de un Real Madrid que el año pasado lo ganó todo y que también será su rival en el Top 16 de la Euroliga.

Se veían las caras por primera vez esta campaña en un abarrotado pabellón el mejor ataque de la competición -el del equipo blanco, con 92 puntos por partido y que esa vez solo estuvo por delante veinte segundos del primer cuarto- y la mejor defensa del campeonato, la de un Barcelona que solo encaja 67,7 puntos de media.

Desde el salto inicial, los catalanes salieron más entonados en ataque, con Tomic, Satoransky y Doellman como referentes de cara al aro, mientras que en defensa supieron cerrar la zona a los actuales campeones, que incurrieron en más pérdidas de las habituales y se mantenían en el choque con los puntos de Sergio Llull y Felipe Reyes, los únicos que lograban anotar.

Con ocho puntos de desventaja, Pablo Laso pidió tiempo muerto a dos minutos del final del cuarto y movió su banquillo. Entonces llegaron dos triples de Maciulis y otros dos consecutivos de Carroll que pusieron por primera y única vez por delante al Real Madrid a veinte segundos del final del periodo.

La alegría duró poco para los de Pablo Laso, ya que otra canasta de tres sobre la bocina de Pau Ribas selló los diez primeros minutos con una ligera ventaja visitante (23-25).

El jamaicano Samardo Samuels tomó en la reanudación el protagonismo ofensivo de los de Xavi Pascual, con ocho puntos en los primeros minutos que mantenían a su equipo por delante ante un oponente que metió una marcha más aunque fue incapaz de alcanzar a su eterno rival.

Pese al intercambio de canastas, las ventajas visitantes se mantenían entre los cuatro y seis puntos gracias a la buena dirección y a las asistencias de Satoransky, que supo suplir la baja de Carlos Arroyo. Otro triple sobre la bocina, esta vez del capitán Juan Carlos Navarro, mantuvo al Barcelona arriba al descanso (44-50).

Tras el paso por vestuarios, el Real Madrid seguía sin chispa, lo que aprovecharon Doellman y Samuels para seguir haciendo daño. Sataoranski subió a once la renta y encendió las alarmas (48-59 min 24).

Poco después, los catalanes se pusieron quince arriba tras sendos dos más uno de Doellman y Navarro (52-67,min 27) que hurgaron en la herida de un Real Madrid que quería y no podía y en el que Laso no encontraba soluciones en el banquillo.

El acierto desde el perímetro de los visitantes elevó su ventaja hasta los 18 puntos y dejó el primer clásico de la temporada casi sentenciado al final del tercer cuarto (58-74).

Ante la desesperación de Laso por los fallos de sus hombres, el Barcelona siguió sumando hasta rondar los veinte puntos de renta.

Dos triples de Taylor bajaron a once la diferencia a cuatro minutos del final y sendas técnicas a Satoransky y Tomic cuando solo quedaban 16 segundos permitieron al Madrid maquillar algo el resultado, aunque el partido ya llevaba varios minutos resuelto a favor de los visitantes (84-91).

84 - Real Madrid (23+21+14+26): Llull (12), Rodríguez (14), Maciulis (11), Reyes (9) y Ayón (6) -equipo titular-, Ndour (1), Nocioni (3), Doncic (-), Carroll (13), Thompkins (4), Hernangómez (-) y Taylor (11).

91 - Barcelona (25+25+24+17): Satoransky (16), Navarro (12), Perperoglou (-), Doellman (17) y Tomic (11) -quinteto inicial-, Ribas (15), Lawal (-), Vezenkov (5), Eriksson (-), Samuels (13) y Oleson (2).

Árbitros: Daniel Hierrezuelo, Fernando Calatrava y Sergio Manuel. Eliminados por personales Satoransky y Tomic por el Barcelona.

Incidencias: Partido de la jornada 13 de Liga disputado en el Pabellón de Deportes de la Comunidad de Madrid ante 13.149 espectadores. El técnico del Real Madrid, Pablo Laso, recibió en los prolegómenos del partido el premio al mejor entrenador de la temporada pasada.