El Real Madrid visita esta tarde (20.30/C+Partidazo) El Madrigal y a un Villarreal en horas bajas, en un partido clave en sus aspiraciones por el título, recuperado del varapalo del clásico con cinco triunfos consecutivos y tras firmar la mayor goleada en la historia de la Liga de Campeones, 8-0, al Malmoe en una cita con Denis Cheryshev de trasfondo.

La alineación indebida de Cheryshev en Cádiz implicó al Villarreal en la situación. El Real Madrid quiso demostrar que no había recibido notificación de la sanción de un jugador al que de nuevo pretende el conjunto castellonense en pleno proceso de despachos para decidir finalmente si el equipo madridista está fuera de la Copa del Rey.

El Madrid llega a una cita clave con la confianza recuperada gracias a cinco triunfos consecutivos, la mejoría en su juego y el trabajo como equipo, y la vuelta a la mejor versión de futbolistas claves.

Los cinco goles en las dos titularidades consecutivas del francés Benzema, un doblete al Getafe y triplete al Malmoe, y la alegría que da al portugués Cristiano Ronaldo batir nuevos registros goleadores, dejando el récord de tantos en una fase de grupos de Liga de Campeones en once dianas, lanzan la cara más ofensiva del equipo de Benítez.

El técnico dedica elogios a Bale, que regresa al estadio donde debutó con gol hace ya dos temporadas y media con el Real Madrid, el 14 de septiembre de 2013. Aún sigue buscando su verdadera identidad en el fútbol español aunque Benítez destaca su cara de asistente, trabajador en la presión y solidario en el tridente al jugar en demarcaciones donde puede explotar peor su juego.

Regresa Ramos, recuperado de su lesión en el hombro que está marcando su temporada. Cansado de infiltraciones y de jugar con dolor, decidió parar tras disputar el clásico. Vuelve para un encuentro importante, en el que le necesita el Madrid sin el francés Varane lesionado. El portugués Pepe se ha recuperado de unas molestias y será titular junto al camero en detrimento de Nacho Fernández, que como siempre ha cumplido ante las bajas.

También se perfila novedad en el equipo titular Marcelo, que volvió a jugar minutos en Liga de Campeones tras su última lesión muscular. Jugadores descansados tras rotar en competición europea como el croata Luka Modric y el alemán Toni Kroos podrán imprimir un ritmo alto al partido que beneficia a un Real Madrid más descansado ante un rival que jugó el jueves y fuera de España. Isco Alarcón podrá ya jugar en Liga tras cumplir dos partidos de sanción, aunque todo indica que comenzará en el banquillo.

Los castellonenses se presentan sin lograr recuperar su solvencia y seguridad defensiva, que tan buenos resultados le habían dado al iniciar la campaña. Atraviesan por problemas en ambas áreas, al tener lesionados a dos de sus delanteros, lo que ha reducido su potencial ofensivo, y habiendo demostrado muchas deficiencias defensivas en los últimos partidos.

A pesar de ello, los amarillos siguen metidos en la lucha por las plazas nobles de la tabla, algo que logran gracias a sus buenos números como locales. Así, mientras a domicilio suman ya dos meses en los que no han logrado ganar, en casa sí que mantienen un buen ritmo de victorias, ya que sólo perdieron con el Celta y empataron con el Eibar.

El técnico Marcelino García sigue con las bajas de los delanteros Leo Baptistao y Adrián, que suman varias semanas fuera del equipo.