El Alcoyano sufrió contra el Olímpic para reencontrase con la victoria en El Collao, hecho que no sucedía desde el pasado 3 de octubre. El conjunto de Palop, en un partido que no pasará a la historia por el derroche de buen juego, encontró el bálsamo preciso para afrontar con más equilibrio y confianza los tres últimos compromisos de 2015.

La parroquia blanquiazul, que volvió a pitar a los suyos en el segundo acto, tuvo que esperar hasta el minuto 63 para vislumbrar el camino del triunfo. Álex Rubio, marcado por un comportamiento irregular, aprovechó una dejada de Pepín en el interior del área para dinamitar la férrea defensa del Olímpic, más apuntalada si cabe con la reciente incorporación de Berna en detrimento de Luismi Loro.

El Deportivo recibió al cuadro setabense con seis cambios en la alineación. La baja de última hora de Rubén Ramos, aquejado de una gastroenteritis, obligó a Palop a alinear tres mediocentros (Fran Miranda, Javi Rubio y Julio de Dios) y a variar el habitual 4-2-3-1 por el clásico 4-3-3.

El primer acto, pese a gozar de la posesión, mantuvo la imagen espesa exhibida en otras tardes. El equipo de Palop aguardó hasta el último minuto para generar su mejor ocasión. Julio de Dios enganchó el balón desde la frontal del área, pero Diego García metió la mano junto al poste desviándolo a saque de esquina. El Olímpic, perfectamente atrincherado en su campo, avisó a balón parado con la ejecución de una falta directa por medio de Álex Vaquero, pero Marc Martínez primero y Javi Rubio después abortaron la mejor oportunidad visitante.

La segunda parte arrancó con los mismos protagonistas pero con una acción clave que, sin duda, podría haber variado el signo del derbi. Marc Martínez, cada día recuerda más al excapitán Fernando Maestro, salvó al Alcoyano de encajar el primer tanto al despejar a boca jarro el disparo del incombustible Luismi Loro.

La respuesta del Deportivo la protagonizó Javi Rubio cuyo remate de cabeza, a pase del intermitente Abraham, salió rozando el poste. Palop, sabedor del atasco, realizó un doble cambio ofensivo. Entraron Borja Sánchez y Álex Rubio por Javi Rubio y Abraham respectivamente.

La incorporación del sevillano Álex Rubio resultó determinante puesto que marcó el primer tanto apenas cinco minutos después aprovechando el balón que dejó muerto Pepín en el interior del área. Álex Rubio volvió a ser protagonista al forzar la expulsión del central setabense Berna (m. 74), bastante rigurosa puesto que dio la sensación de que el exalcoyanista tropezó con el delantero sin intención de agredirle.

Con superioridad numérica, el Alcoyano encontró más espacios y llegó con más facilidad al área del Olímpic. El punta Yacine pudo sellar el triunfo mucho antes pero malogró una clara ocasión. Pero fue Alfaro el que cerró el partido en el minuto 92.