El presidente del Orihuela, Antonio Felices, se mostró ayer muy «satisfecho y contento» por la nueva dinámica que lleva el conjunto escorpión después de su mal inicio de Liga. Felices admitió que cuando el equipo llegó a situarse en los puestos bajos y no conseguía ganar, «se solicitó desde todos los ámbitos la cabeza del entrenador, pero acordamos mantenerlo y buscar cual era el problema antes de tomar esa decisión. Y al final el resultado ha sido muy positivo», destacó.
«El trabajo que hacía Correa era bueno, pero, en esos momentos, era imposible ganar porque había que hacer cuatro goles en cada partido para ello, ya que siempre encajábamos. Supimos desde el primer momento que la paciencia era importante después de la experiencia de la pasada temporada en la que muchos cambios de entrenadores no resultaron bien», comentó el presidente a la vez que recordó que la ambición de la directiva «no era ser decimoquinto y sí estar entre los cuatro primeros. Hemos tenido que ser muy pacientes y ahora estamos en una dinámica muy positiva».
