El Gobierno belga ha elevado desde el 2 al 3 el nivel de alerta de amenazas para grandes actos públicos, como el partido amistoso que enfrentará mañana (20.45/Telecinco) a las selecciones de fútbol de Bélgica y España, informó ayer el primer ministro, Charles Michel.

El consejo nacional de seguridad ha evaluado el último informe del órgano de coordinación para el análisis de la amenaza y ha decidido aumentar en un escalón el nivel de alerta.

Esa decisión significa que el Ejército puede ser desplegado para los grandes eventos deportivos y culturales.

«El análisis de los eventos se efectuará caso por caso en lo que se refiere al nivel de seguridad, los controles y el envío de patrullas», señaló el primer ministro.

El consejo de seguridad nacional se reunió por segunda vez tras los atentados de París para analizar los riesgos en territorio belga, donde el sábado fueron detenidas tres personas presuntamente vinculadas con el ataque múltiple.

En los atentados en la capital francesa murieron al menos tres ciudadanos belgas.

El partido amistoso Bélgica-España se mantiene como estaba estipulado, si bien se jugará con estrictas medidas de seguridad.

La Unión Belga de Fútbol (URBSFA) ha emitido un comunicado en el que indica que «tras los atentados sucedidos el viernes en París la URBSFA ha contactado con la Federación Española y las instancias competentes en materia de seguridad y la decisión ha sido mantener la disputa el partido amistoso».

«Por razones de seguridad, insistimos en que será imposible que los aficionados puedan entrar en el estadio con una mochila», apunta el comunicado, así como señala que se efectuarán controles adicionales a la entrada al Rey Balduino. Así mismo, recomienda a los seguidores que lleguen lo antes posible por las presumibles colas a la entrada.

Por otro lado, se guardará un minuto de silencio antes del inicio del partido en memoria de las víctimas de los atentados, y el cuerpo arbitral y los jugadores lucirán brazaletes negros.

Por su parte, la canciller alemana, Angela Merkel, tiene previsto asistir mañana al partido amistoso que enfrentará en Hannover a las selecciones de fútbol de Holanda y Alemania, después de que el combinado germano se encontrara jugando contra Francia el viernes en París.

El diario Bild avanzó las intenciones de la canciller y, citando fuentes gubernamentales, señaló que su intención es ir al partido acompañada del resto de miembros del gabinete.

En declaraciones a ese periódico, el vicecanciller alemán, Sigmar Gabriel, consideró que la selección ha tomado la decisión «correcta» al mantener el encuentro contra Holanda a pesar de los atentados.

«Justo ahora no debemos no retrocederemos», manifestó.

En un comunicado, la Federación Alemana (DFB) confirmó ayer que se jugará el partido y disipó las dudas surgidas tras los ataques de París, que presumiblemente tenían entre sus objetivos el estadio en el que Francia y Alemania disputaban un amistoso.

«Como equipo queremos dar una señal de unidad. Con el pueblo francés, con los familiares de las víctimas», manifestó el director deportivo de la selección alemana, Oliver Bierhoff.