El Orihuela consiguió su tercera victoria consecutiva tras ganar por 2-3 al Benigànim en un encuentro en el que remontó el gol inicial del conjunto valenciano para confirmar su salida definitiva de la crisis deportiva en la que estaba sumido hasta hace poco.

El entrenador del conjunto escorpión, Gabi Correa, tuvo que dirigir a su equipo desde la grada al encontrarse sancionado y también estuvieron ausentes por lesión el delantero Kike Espinosa y el mediocentro Theo, pero debutó de entrada como titular el central Alexis, que tuvo una buena actuación.

No fue un partido fácil para los oriolanos que se encontraron con un rival muy motivado que a los 12 minutos se adelantó en el marcador gracias a un gol de penalti que transformó Koeman. Sin embargo, el equipo de Correa parece haber encontrado en las últimas jornadas la clave para mostrar su potencial cuando realmente lo necesita, y la reacción no se hizo esperar. Entre los minutos 23 y 29 Juanjo, de penalti, y Joaquín Pastor lograron dar la vuelta al marcador para poner a su equipo 1-2 con el que se llegó al descanso.

La segunda parte fue más intensa para un Orihuela que salió a por todas en busca de sentenciar el partido. El conjunto amarillo tenía claro que no quería terminar sufriendo y para ello era necesario un tercer gol que llegó en el minuto 59. Raúl González, uno de los últimos fichajes, firmó ese tanto que sería decisivo para la victoria final, ya que el Benigànim no se vino abajo y buscó desde ese momento la portería de Emilio con mucha más convicción.

De esa forma, Soler hizo el 2-3 en el minuto 67, con el que metía el miedo en el cuerpo a los oriolanos y con razón, porque el partido se igualó y se convirtió en un correcalles con ocasiones en ambas porterías.

Por mucho que intentó evitarlo, al Orihuela le tocó sufrir en el tramo final de un partido que acabó muy abierto. Ninguno de los dos conjuntos fueron capaces de hacer más goles y el cuadro escorpión suma tres puntos de oro que le permite seguir escalando puestos en la clasificación.