El Balonmano Benidorm recibe mañana al Barcelona (20.30 horas) en el Palau de l'illa con el objetivo de mejorar sus sensaciones de cara a las próximas jornadas ya en la plantilla se asume que será prácticamente imposible tumbar al actual campeón y líder de la Liga.

El equipo de Fernando Latorre acumula seis jornadas consecutivas sin ganar, lo que supone su peor racha en la Asobal, y se encuentra en zona de descenso por vez primera desde que logró el ascenso.

El conjunto benidormense se ha conjurado para afrontar el partido sin complejos y ofrecer una buena imagen que permita reforzar su autoestima de cara la recta final de la primera vuelta, en la que le esperan rivales más asequibles.

El recuerdo del pasado año, en el que el Benidorm llegó a dominar por seis goles al Barcelona, sirve de motivación a los jugadores de Latorre, que pese a la derrota final salieron reforzados de aquel encuentro.

El Benidorm afrontará el encuentro con la baja de última hora de Iván Amarelle, quien no podrá jugar ante el Barcelona al sufrir un esguince de tobillo en el entrenamiento del pasado lunes.

Latorre no podrá contar, además, con Víctor Sáez, jugador cedido por el Barcelona que se encuentra lesionado de la rodilla, ni con el ruso Danil Chernov, en fase de rehabilitación tras una intervención en la espalda.

El Benidorm recupera para este compromiso al francés Fabrice Brive, quien se perdió el último encuentro ante el Naturhouse por el fallecimiento de su padre.