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El España-Inglaterra que abarrotó La Viña

Alicante acogió el 9 de febrero de 1972 un amistoso internacional juvenil ante los ingleses

El España-Inglaterra que abarrotó La Viña Fotos de perfecto arjones

Alicante acogerá el viernes 13 del presente mes por segunda vez un partido internacional amistoso entre las selecciones de España e Inglaterra. Eso sí, en un estadio diferente dado que el primero, disputado el 9 de febrero de 1972, tuvo lugar en el campo de La Viña, coliseo desaparecido del barrio de La Florida. En aquella ocasión, el encuentro entre ambos combinados nacionales pertenecía a la categoría juvenil y entre las notas destacadas incluía en el equipo español a dos alicantinos que se habían hecho un hueco entre los jóvenes futbolistas con proyección en el Hércules: Ernesto Llobregat y Joaquín Carbonell. En edad juvenil, Ernesto y Carbonell comenzaron a despuntar con la selección murciana (el fútbol alicantino entonces pertenecía a esa delegación federativa) hasta el punto de quedar incluidos en el plan de Héctor Rial, seleccionador nacional encargado de confeccionar un bloque competitivo para afrontar el Europeo de la categoría que en 1972 iba a acoger Checoslovaquia. Para ello se cumplió con el calendario de preparación que un año antes incluía el torneo Atlántico, un cuadrangular que se celebraba durante un mes de la estación invernal en Canarias ante Francia, Polonia y Austria, con futbolistas de la talla de Kurt Jara o Herbert Prohaska. El seleccionado español tampoco quedaba atrás. Jugadores como Arconada, Satrústegui, Macanás o el propio Juan Gómez «Juanito» comenzaron a destacar en aquel equipo juvenil que tras disputar el torneo Atlántico regresó a la península para afrontar un amistoso en Alicante frente a la temible Inglaterra, uno de los bloques más potentes del continente. La elección de La Viña como escenario pudo tener mucho que ver con Luis Cremades, un directivo del Hércules, abogado de profesión y residente en Madrid, con excelentes relaciones con Pérez Payá, un alcoyano que en ese momento presidía la Federación Española. El encuentro quedó fijado para el 9 de febrero de 1972 en el campo de La Viña y Héctor Rial convocó a los alicantinos Ernesto y Joaquín Carbonell, los dos laterales que ya había utilizado con antelación en el torneo Atlántico de Las Palmas.

Ambos herculanos formaron aquel día en un once con otros jóvenes valores que acabaron dejando huella en Primera División. Entre ellos Olmo, defensa que despuntó en el FC Barcelona, y Juan Gómez «Juanito», el recordado delantero que se convirtió en leyenda en el Real Madrid. Curiosamente, Juanito saltó al césped de La Viña a los quince minutos de juego para sustituir a Carbonell, el lateral alicantino que aquel día sufrió una terrible lesión en el ligamento de la rodilla que marcaría su vida deportiva. Asimismo, también en la segunda parte del encuentro salió al terreno de juego Satrústegui, ariete donostiarra que marcó época como delantero de referencia en la Real Sociedad que dominó el fútbol español a comienzos de los ochenta. El realista suplió a Juan Carlos Vidal, otro delantero que sacó la cabeza en Primera División de la mano del Athletic y que años más tarde acabó recalando en el Hércules, también en la máxima categoría. Trayectoria similar a la de Macanás, un murciano cuya calidad le llevó de Murcia al Real Madrid y posteriormente al Hércules de finales de los años setenta.

El encuentro internacional juvenil de aquel 9 de febrero de 1972 colgó el cartel de «no hay billetes» en La Viña, tal y como va a pasar en el Rico Pérez el próximo día 13. El choque, muy disputado, deparó ocasiones para ambos bandos, pero el marcador no se movió. El alicantino Joaquín Carbonell tuvo tiempo para emocionarse con el himno y para lamentar una lesión que marcó su vida deportiva.

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