El filial del Barcelona acabó con el momento dulce del Alcoyano, que no conocía la derrota en las cuatro últimas jornadas con el balance de 12 puntos de 15 posibles.

El conjunto azulgrana se estrenó como ganador en el Mini Estadi con un solitario gol de Aitor al filo del descanso. El Deportivo avasalló a su rival en el segundo acto pero tropezó con la gran actuación del portero Ortolá que impidió al menos el empate, un resultado que hubiera hecho justicia a los méritos contraídos por el equipo entrenado por Andrés Palop que se presentó en la Ciudad Condal con la ausencia de Julio de Dios, Borja Sánchez, Yacine y Javi Rubio, cuatro futbolistas que perfectamente podrían haber formado parte del once inicial.

El técnico, no obstante, apostó por una alineación previsible tomando como referencia la relación de convocados, de la que se cayó a última hora el interior zurdo juvenil Ángel. Carles Salvador, con escaso protagonismo en las jornadas precedentes, ocupó el puesto del lesionado Javi Rubio, mientras que Álex Rubio se confirmó como el recambio natural del también renqueante Yacine.

La novedad más significativa fue la continuidad del canario Abraham, que desplazó al banquillo a Mustafá. Con Rubén Ramos en plenitud física, Abraham dispuesto a sacrificarse en labores defensivas y el excelente momento de Alfaro, el cuerpo técnico parece tener definidas las plazas de ataque. El filial del Barcelona, a diferencia de su rival, recuperó a jugadores importantes como Kaptoum, Gumbau y Cámara. El entrenador, Gerard López, incluyó a los dos últimos en la alineación destacando sobre todo la aportación de Gumbau en la jugada del único gol.

Solidez inicial

El Alcoyano se mostró muy sólido en la primera media hora de juego. Selló perfectamente los espacios y ahogó la circulación de balón del Barcelona B. Había que impedir a toda costa que el equipo de Gerard se encontrara cómodo sobre el rectángulo de juego. Abraham lideró el ataque en el primer acto ya que prácticamente participó de una u otra forma en casi todas las acciones. Primero, lazó una falta lateral que despejó con apuros la defensa. Acto seguido, probó fortuna desde lejos poniendo a prueba los reflejos de Ortolá.

Alfaro, en un gran estado de forma, arrancó desde la banda y gambeteó con dirección al área. Cuando se decidió a disparar tuvo la mala fortuna de que la pierna de un defensor se interpuso entre el balón y la portería.

Abraham, otra vez, sacó un córner en corto sobre Carles Salvador que le devolvió el balón. El canario lo puso en el segundo palo donde Mario Fuentes remató de cabeza abajo pero anduvo más listo Ortolá.

Rebasada la media hora el filial se sacudió la presión del Alcoyano. Samper y Gumbau comenzaron a carburar en la medular y a generar situaciones de peligro sobre el área de Marc Martínez, un mero espectador hasta el momento. Cámara condujo el balón desde la línea de tres cuartos y lo sirvió medido a Dongou que desde el punto de penalti disparó ligeramente cruzado. El Barcelona B no perdonó en el segundo aviso. En este caso fue Gumbau el que habilitó el esférico entre líneas a Aitor que solo ante Marc Martínez se adornó picándolo hasta el fondo de la red. La primera parte finalizó con un nuevo disparo de Cámara que atajó sin problemas el portero, con pasado azulgrana.

Ocasiones claras

El Alcoyano inició la segunda parte con una única obsesión: el gol. En apenas tres minutos dispuso de dos claras ocasiones para haber equilibrado el marcador. La primera fue para Rubén Ramos que solo en el segundo palo empalmó con pierna izquierda el balón centrado por Alfaro. Al madrileño le faltó afinar más la puntería. En el mismo caso se encontró después Alfaro que echó fuera el pase de la muerte de Navarro.

La figura de Ortolá emergió en el momento preciso. El portero comenzó el rosario de paradas abortando el disparo a la media vuelta de Álex Rubio. Acto seguido, interceptó el pase de Fran Miranda a la frontal del área pequeña con destino al delantero sevillano.