El centrocampista argentino Pablo Vivanco tuvo que abandonar el domingo el terreno de juego del Nuevo Pepico, pasada la primera media hora del partido que le enfrentó al Valencia Mestalla, debido al fuerte golpe que recibió en los isquiotibiales de su pierna derecha.

El futbolista azulgrana pensó lo peor cuando vio que no podía continuar jugando pero las diferentes pruebas que le han efectuado los médicos durante los últimos días han descartado que sufra cualquier tipo de lesión grave.

No obstante, el jugador argentino se ejercitó ayer aparte del grupo realizando carreras alrededor del terreno de juego del campo Santa Bárbara de Monóvar pero no terminan de desaparecer las molestias y no sabe con certeza el alcance exacto de la lesión que, casi seguro, le dejara fuera del próximo partido.